Había mucha expectación en Uruguay. Tras la humillante goleada 5-1 ante Estados Unidos del pasado martes, Marcelo Bielsa citó a una conferencia de prensa este jueves en Montevideo. Se especulaba con que podría renunciar a su cargo como DT de la selección charrúa.
Fue una conferencia muy larga. De entrada, el ex DT de la "Roja" confirmó que sigue en el cargo.
"Tengo la misma fuerza desde el primer día para seguir con la selección en el Mundial", afirmó el "Loco".
Luego a Bielsa, le preguntaron por su relación con el plantel. En la pasada Copa América, el histórico Luis Suárez aseguró que los futbolistas se sentían maltratados por el técnico, que ni siquiera los saludaba.
"Suárez dijo lo que dijo y tuvo el efecto que tuvo. Yo nunca respondí al mensaje que dio. Pero sí hablé internamente con los jugadores. Evidentemente, un episodio como ese, lo que pasó esa vez no es lo que estamos acostumbrados a que sucediera, que los reclamos se hicieran públicos, que no se hicieran en el ámbito privado", manifestó Bielsa.
"Todo eso pasó, no tengo rencor y revanchismo. Justamente lo otro, si tengo que recordarlo a Suárez, no lo recuerdo por lo que dijo sobre mí, si no lo que le dio al desarrollo de la Copa América. Él nos ayudó salir terceros", añadió.
Los periodistas presentes le comentaron que ellos tenían una información. Al parecer, los jugadores se acercaron a la dirigencia para pedir la salida del argentino.
Bielsa lo calificó como un trascendido. "Hay una cosa que es clara, respecto a este tipo de trascendidos, lo que se difunde nunca es el bien. Se persiguen los intereses. Siempre que se produce el momento propicio para facilitar una conducción trastabille, los que tienen intereses estimulan el momento y propician que trastabille", declaró.
"Si los jugadores quieren que me vaya, es muy sencillo. Vienen y me dicen: 'Bielsa, queremos que se vaya'. Por eso no me puedo guiar por ningún transcendido. Me tengo que guiar por el día a día, por lo que veo, por lo que recibo, por cómo convivo, por el tipo de relación que se entable. Yo tengo información directa con los protagonistas, entonces no puedo guiarme por trascendidos", complementó.
Siguiendo en esa línea, fue brutalmente honesto: "Yo todavía no he logrado aceptación de este grupo que yo conduzco. Cuando uno va a un lugar las normas no son las que uno tiene, las normas son las del lugar que te recibe sin dejar de ser uno mismo".
Uno de los reporteros puso uno de los trascendidos que circula sobre la mesa. Entre otras cosas, a los jugadores les molestaría que Bielsa los haga entrenar por separado. Sin embargo, el comunicador dijo que no podía comprobar eso porque era imposible acceder a los entrenamientos de "La Celeste".
El "Loco" recordó algo que le pasó en Chile. "Yo dirigí en Chile. Tenía dentadura postiza en los dientes. Yo al otro día dejé entrar a los periodistas y fui al entrenamiento sin la dentadura. Y al otro día la tapa de los diarios chilenos era la boca vacía. El rasgo del valor del conocimiento especifico futbolístico respeto de la repercusión amarilla de situaciones...", apuntó.
Bielsa, que antes de hablar con los medios conversó con los dirigentes, llamó a resolver las diferencias puertas adentro.
"Toda mi carrera fui valorado por los jugadores. En este período, donde yo más maltrato recibo, en algunos casos concreto como el de Suárez, y en otros casos potenciales. Siempre hay dificultades y el que conduce nunca cuenta lo que pasa. Si uno cuenta lo que pasa, la convivencia se vuelve imposible", lanzó.
Por último, también reconoció que su forma de ser en este caso le está trayendo problemas.
"Yo soy tóxico. Relacionarme conmigo empeora al que se relaciona conmigo. Soy tóxico. Hay tipos tóxicos. Tipos que solo ven el error, que demandan, que nunca están satisfechos con nada, que les gusta hablar solo del trabajo, que va a comer y lleva un diario porque no quiere integrarse con el resto. Yo lo vivo como un karma, pero ¿saben en qué está basada esa conducta? En el miedo, porque uno no disfruta por ganar, teme por perder mucho más de lo que disfruta por ganar", cerró.