y ahora se abren análisis más profundos por parte de diversos líderes y exlíderes mundiales en torno a las implicancias de futura gestión de lo que será su segundo periodo -intercalado con Joe Biden-, luego que asuma en el cargo el 20 de enero de 2025.
Entre otras cosas, además de su conocido discurso antiimigración, Trump mostró durante su campaña un enfoque aislacionista en materia diplomática y proteccionista en cuanto a la economía. De hecho, los expertos han señalado que este último factor fue clave para su triunfo.
Por cierto, los aliados del republicano y todos quienes mantienen una cercanía ideológica han salido a exaltar el triunfo, mientras miran con altas expectativas los buenos réditos que las medidas de Trump les puede traer a sus naciones.
No obstante, otras voces, quienes esperaban el triunfo de Harris, han salido a apuntar contra el Partido Demócrata, por "darle la espalda" a la clase trabajadora, grupo que ahora los castigó en estos comicios. Otras voces, en tanto, han llamado a "radicalizarse" en sus naciones, en una suerte de autocrítica a la "pasividad de la izquierda".
Patricia Bullrich destaca "liderazgos provocadores" y "nacionalismos inteligentes"
La primera línea del gobierno de Argentina sólo ha transmitido buenos comentarios y proyecciones a raíz del triunfo del republicano. Conocida es la cercanía política del libertario Javier Milei con Trump, quien habló de una "formidable victoria electoral" y, de paso, ya vio cómo se dispararon los activos argentinos por la eventual ayuda que el presidente electo podría brindarles para conseguir más recursos del Fondo Monetario Internacional (FMI), según consignó EFE.
Más extensa fue la celebración y reflexión de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien atribuyó el liderazgo a un triunfo del capitalismo y elogió el liderazgo "fuerte y provocador" de Trump.
"Los liderazgos fuertes y provocadores y el nacionalismo inteligente superan los nuevos derechos promovidos por la izquierda".
Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de Argentina
En su cuenta de X, Bullrich enumeró seis reflexiones. La primera apunta a que "los periodistas ya no son el cuarto poder: se acabaron las narrativas de los grandes medios". En segundo lugar, afirmó que "las encuestas ya no sirven como diagnóstico ni como termómetro: los métodos conocidos de medición de opinión pública quedaron atrás, ya no tienen capacidad de predecir el sentir del electorado".
En tercer lugar, y bajo el enunciado "es la economía, estúpido", enfatizó en que "no hay nada que supere el peso de la economía. El bolsillo sigue siendo el factor clave para la mayoría de los votantes".
En cuarto lugar, dijo que "el capitalismo sigue vivito y coleando", puesto que "sigue siendo la estructura económica predominante y atractiva".
En un quinto punto apuntó a que "los inmigrantes disfrutan del capitalismo cuando empiezan a trabajar: encuentran en el sistema capitalista oportunidades que valoran y disfrutan".
Y por último, apuntando a Trump, subrayó que "los liderazgos fuertes y provocadores y el nacionalismo inteligente superan los nuevos derechos promovidos por la izquierda".
Pablo Iglesias: "Toca radicalizarse"
El exvicepresidente de España y exlíder de Podemos -partido situado en la extrema izquierda de su país-, Pablo Iglesias, instó a su sector a "radicalizarse" en el escenario político español, luego de la victoria trumpista.
"Hay una lección importante para la izquierda española de las elecciones en EE.UU. Pensar que funcionará el 'Salvemos a Sánchez para que no gobierne el PP con VOX' es regalarle el tablero de juego a la ultraderecha. Toca radicalizarse, no buscar un centro que no existe", escribió en su cuenta de X.
De acuerdo a La Razón de España, Iglesias cuestionó que Kamala Harris no había ofrecido "nada" a la clase trabajadora; incluso, la única propuesta que le atribuye a la excandidata demócrata es que no era Donald Trump. Destacó además la ausencia de medidas por derechos laborales, protección de sectores racializados y por ofrecer una respuesta difusa en torno al conflicto en Medio Oriente.
Obama: "Vientos en contra para los gobernantes demócratas"
Una sentida reflexión tuvo el exmandatario estadounidense, Barack Obama, quien tras el triunfo de Donald Trump y de que Kamala Harris asumiera su derrota, apuntó a que en los últimos años se han dado condiciones que han creado "vientos en contra para los gobernantes demócratas de todo el mundo".
"Estos problemas tienen solución, pero solo si nos escuchamos unos a otros y respetamos los principios constitucionales y las normas democráticas que han hecho grande a este país", añadió el exmandatario.
¿A qué problemas globales apunta Obama? A la pandemia, la subida de precios y la sensación "que tiene mucha gente de que, por mucho que trabajen, lo mejor que pueden hacer es mantenerse a flote", afirmó.
De todas formas, aunque reconoció que este no era el resultado que esperaban "dadas nuestras profundas discrepancias con la candidatura republicana en toda una serie de cuestiones", destacó que "vivir en una democracia consiste en reconocer que nuestro punto de vista no siempre ganará".
Bernie Sanders al Partido Demócrata: "No debería ser una sorpresa"
Una postura crítica con los demócratas tuvo el senador independiente de Vermont, Bernie Sanders, quien el fin de semana compartió en redes sociales el momento en que acudió a votar por la demócrata Kamala Harris.
"Este día de elecciones es uno de los más importantes en la historia de nuestro país. Me sentí orgulloso de emitir hoy mi voto por Kamala Harris y quiero agradecer a todos los habitantes de Vermont que apoyaron mi candidatura al Senado de los Estados Unidos", escribió en X.
Sin embargo, tras los resultados, compartió en dicha red social una reflexión que no ha pasado desapercibida: "No debería ser una sorpresa que un Partido Demócrata que ha abandonado a la clase trabajadora descubra que la clase trabajadora los ha abandonado a ellos", partió diciendo Sanders.
Añadió que "mientras el liderazgo demócrata defiende el statu quo, el pueblo estadounidense está enojado y quiere un cambio. Y tienen razón".
"No debería ser una sorpresa que un Partido Demócrata que ha abandonado a la clase trabajadora descubra que la clase trabajadora los ha abandonado a ellos".
Bernie Sanders, senador de EEUU
La reflexión la acompañó con un documento donde entregó su balance sobre los resultados electorales. Por ejemplo, destacó que los trabajadores se desligaron de los demócratas, y subrayó que "primero fue la clase trabajadora y blanca, y ahora son también los trabajadores latinos y negros".
También apuntó a la desigualdad económica que afecta a los estadounidenses, donde un 60% debe vivir "de cheque en cheque", mientras que a los ricos les va "fenomenalmente". "Increíblemente, los salarios semanales reales, contabilizados según la inflación, para el trabajador promedio son en realidad más bajos ahora que hace 50 años”, justificó su punto", afirmó.
El senador también mostró desesperanza respecto al futuro, asegurando que muchos jóvenes tendrán una peor vida que sus padres, e incluso destacó que la inteligencia artificial y la robótica pueden ser parte de los factores que empeoren su situación.
Asimismo, cuestionó el sistema sanitario, y acusó que son la única nación rica que "no garantiza la atención a todos como un derecho humano y pagamos, con diferencia, los precios más altos de mundo" por los medicamentos. En tanto, sobre el conflicto en Medio Oriente, fue tajante al criticar que "se están gastando miles de millones de dólares para financiar la guerra total del gobierno extremista de Netanyahu contra el pueblo palestino", situación que, aseveró, es rechazada por la mayoría de los estadounidenses.
Con todo, Sanders terminó con una serie de preguntas con las que respondió: "por supuesto que no". "¿Aprenderán los grandes intereses monetarios y los consultores bien pagados que controlan el Partido Demócrata alguna lección real de esta desastrosa campaña? ¿Comprenderán el dolor y la alienación política que están experimentando decenas de millones de estadounidenses? ¿Tienen alguna idea sobre cómo podemos enfrentarnos a la cada vez más poderosa oligarquía que tiene tanto poder económico y político?", inquirió.
Asimismo, afirmó que su Gobierno está abierto a "relaciones de trabajo conjunto" con quien quiera invertir en Venezuela, lo que -aseguró- ha manifestado a "todos los estadounidenses" que visitan el país petrolero, sobre el que pesan sanciones impuestas por Washington, que ha otorgado licencias a transnacionales para operar en esta nación, entre ellas, a la norteamericana Chevron.
Maduro también reflexionó que "tras este regreso histórico", Trump tiene una "oportunidad de oro" para que "acabe con las guerras", así como para permitir relaciones de respeto con América Latina.
