Un juez pidió este martes al Tribunal Supremo de España que abra una investigación contra el ministro de Justicia de ese país,
Félix Bolaños, en el marco de la indagatoria contra
Begoña Gómez, esposa del presidente de Gobierno
Pedro Sánchez que es acusada de tráfico de influencias y corrupción.
La solicitud fue ingresada por el titular del Juzgado de Instrucción N°41 de Madrid, Juan Carlos Peinado, quien pidió que se investigue a Bolaños por los presuntos delitos de malversación y falso testimonio por la contratación de María Cristina Álvarez, directora de Programas de la Secretaría General de la Presidencia que también habría prestado al mismo tiempo servicios particulares a Begoña Gómez.
Dicha contratación se habría realizado de forma fraudulenta, ya que no hubo un proceso de selección pertinente. Es por eso que, el pasado 16 de abril,
el ministro de Justicia tuvo que declarar ante el juez en calidad de testigo.
Según explica Infobae, durante el interrogatorio se le consultó en reiteradas ocasiones a Bolaños por quién fue la persona concreta que propuso a Álvarez, pero el ministro aseguró que "no conocía el nombre de dicha persona". Minutos después, afirmó que la contratación la hizo Raúl Díaz Silva, alto funcionario del Gobierno.
Tras ello, el juez Peinado citó a Díaz, quien a su vez dijo que él "no había sido quien realizó el nombramiento" de la asesora de Begoña Gómez. Esta contradicción en las declaraciones fue suficiente para que el magistrado solicitara la imputación de Bolaños, ya que su declaración "fue incierta", "lo que le atribuye, indiciariamente la condición de investigado en un delito de falso testimonio".
"Siendo el investigado, Félix Bolaños García, Ministro de Justicia, y, por tanto, el Notario Mayor del Reino, nos encontramos ante
el paradigma de un oxímoron cuando, estando bajo juramento y en una diligencia judicial,
su testimonio, en una actitud totalmente proterva, no se ajusta a la realidad", aseguró el magistrado, según recoge Infobae.
Para Peinado, la declaración del titular de Justicia "debe ser considerado como un testimonio falso y lo que constituye el indicio principal, para que se eleve esta Exposición razonada por el delito de falso testimonio en causa Judicial, además de por el delito de malversación de fondos públicos".
Esta acusación suma un nuevo capítulo en la investigación contra Begoña Gómez, imputada por los delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida e intrusismo, estos dos últimos por el registro a su nombre de la marca TSC Transformación Social Competitiva, plataforma de empresas idéntica a una desarrollada por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), donde trabajó la esposa de Sánchez.
De acuerdo con la indagatoria, María Cristina Álvarez trabajó como asistente personal de Gómez en la UCM, al mismo tiempo que se desempeñaba como directora de Programas de la Secretaría General de la Presidencia. Esto quedó demostrado en una serie de correos presentados por la propia defensa de la esposa del Mandatario español.
Según OK Diario, Gómez y Álvarez se conocen desde hace más de 20 años, cuando trabajaron juntas en la consultora Inmark, iniciando una férrea amistad. Así, en 2018, tras el triunfo electoral de Pedro Sánchez, la funcionaria llegó a trabajar al Palacio de La Moncloa.