La ministra de Educación, Adriana Delpiano, sostuvo que la propuesta "se requiere desde el punto de vista de justicia de los profesores".
Aton Chile
SANTIAGO.- La ministra de Educación, Adriana Delpiano, se desmarcó esta tarde de la postura de su par de Hacienda, Rodrigo Valdés, respecto a la creación de un bono de incentivo al retiro para los profesores que estén en edad de jubilar, propuesta que fue aprobada la semana pasada por la comisión de Educación de la Cámara de Diputados, pese a que el Gobierno la declaró inadmisible.
Esta tarde, sin embargo, durante el segundo bloque de la sesión citada por la comisión de Hacienda para revisar el proyecto -previo a su votación en Sala y posterior ingreso al Senado- la titular de Educación sostuvo que este bono "se requiere desde el punto de vista de justicia de los profesores, pero también desde una necesidad inherente al proyecto".
"Yo creo que es así (...) más bien es cómo y cuál es la oportunidad y eso lo verá el ministro (de Hacienda)", dijo Delpiano.
Junto con ello, explicó que actualmente en el país existen 40 mil profesores entre los 26 y 36 años; 22 mil entre los 36 y 60 y alrededor de 3.800 con más de 65 años de edad, por tanto, "se observa una caída muy brusca (...) quedan temas sobre la mesa sin duda, pero focalizar una discusión en esto, respecto del total, es un error", dijo el ministro.
Implicaría gasto de $344 mil millones en sector municipal
Tras esto, el director de Presupuesto de la cartera de Hacienda, Sergio Granados, dio a conocer los costos preliminares que implicaría aprobar este bono de incentivo al retiro en un plazo de diez años. En esa línea, explicó que de aprobarse la propuesta, el Estado tendría que destinar $344 mil millones sólo al sector municipal en un plazo de diez años, gasto que sólo cubriría el 78,5% del total, mientras que la diferencia tendría que asumirla cada sostenedor.
En total, la aprobación de dicho bono al retiro implicaría la inversión extra de US$ 72 millones al año, considerando a ambos sectores educacionales.