Senadores y diputados de ambos bloques se unieron, por ejemplo, en la defensa de la educación pública.
Jonathan Mancilla, El Mercurio
SANTIAGO.- Pese a que durante la campaña presidencial y parlamentaria mantuvieron una distancia infranqueable, desde que Sebastián Piñera ganó las elecciones presidenciales han sido numerosos los guiños entre el Frente Amplio y la ex Nueva Mayoría.
Y aunque los acercamientos comenzaron de manera tibia, estos se intensificaron una vez que el Mandatario llegó a La Moneda: En los dos meses que llevan juntos como oposición, ambos bloques ya han concretado distintos grupos de trabajo y coordinación.
Todo comenzó durante el verano, cuando la necesidad de conformar la composición y presidencia de las distintas comisiones de la Cámara de Diputados los llevó a actuar de forma unitaria, con el objetivo de preservar la mayoría opositora en el parlamento.
En ello, el jefe de la bancada del PS, Manuel Monsalve, fue el principal artífice de las conversaciones con el bloque frenteamplista, llegando a un acuerdo satisfactorio para ambas partes. Fue el inicio de un diálogo que no terminaría ahí.
Si bien las mesas de trabajo convocadas por Piñera generaron diferencias en el bloque, también dieron pie para unirlos. Fue así como las diputadas Maite Orsini (RD), Gael Yeomans (IL), Camila Vallejo (PC) y Andrea Parra (PPD) decidieron montar una comisión de seguridad paralela a la del Ejecutivo.
La idea del grupo, según sus integrantes era analizar y diagnosticar la situación actual de la seguridad en el país, marcando una diferencia con la centro-derecha con propuestas de "políticas públicas que vayan en la línea de la reinserción social".
Otro punto de encuentro fue el tema de los DD.HH. Primero fue la decisión de impulsar juntos el proyecto de ley enviado por la ex Presidenta Michelle Bachelet al Congreso para otorgar una reparación a las víctimas de prisión política y tortura durante la dictadura.
Dicho proyecto fue aprobado en la comisión del ramo de la Cámara Baja por los diputados de los dos bloques. A ello se sumó el repudio conjunto hacia la decisión del Gobierno de retirarlo y a la reacción del diputado UDI, Ignacio Urrutia, quien calificó de "terroristas" a los eventuales beneficiarios de ese programa.
Asimismo, otra muestra de acercamiento ha sido el
apoyo mutuo que han demostrado contra el ministro de Salud, Emilio Santelices, luego de que este modificara el reglamento de la aplicación de objeción de conciencia de la Ley de aborto en tres causales, que la Contraloría declaró ilegal.
El PS fue el que solicitó la revisión ante el organismo, luego el Frente Amplio respaldó la interpelación que impulsó la diputada del Partido Radical, Marcela Hernando y ahora el Frente Amplio busca los respaldos para una acusación constitucional.
¿Entusiasmo?
Esta semana no solo tuvo señales entre ambos bloques en asuntos parlamentarios, sino que también en el aspecto político, eso sí con matices.
Una declaración que fue celebrada por la antigua coalición de Gobierno, fue la del diputado de RD, Pablo Vidal, quien afirmó que "buena parte del futuro del Frente Amplio se juega en las elecciones municipales del 2020" y en ese sentido dijo a La Tercera que "
una señal de gobernabilidad sería coordinarnos con la ex Nueva Mayoría".
El mismo Vidal aclaró eso sí a
Emol, que "hubo un exceso de entusiasmo" con sus dichos y aclaró que lo que busca es modificar el sistema de elecciones municipales.
Asimismo la oposición, integrada por ambos bloques, crearon el "
frente por la defensa de la educación pública". El grupo está integrado por diputados y senadores miembros de la comisión de Educación, como Yasna Provoste (DC), Jaime Quintana (PPD) y la diputada Camila Rojas (IA).
Ellos, en conjunto, acusan a La Moneda de querer retroceder en los derechos adquiridos bajo el Gobierno de la ex Presidenta Michelle Bachelet.
En tanto, este sábado se desarrolló el seminario "Los Nuevos Desafíos del Socialismo Chileno", en donde desde el PS reafirmaron la necesidad del instalar el dialogo con el FA para reconstruir a eje de izquierda en el país. Al evento asistieron importantes figuras del frenteamplismo, como Sebastián Depolo de RD y el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp (MA), quienes respaldaron dicha idea.
Sin embargo, no es el único encuentro que ha ocurrido entre ambas partes. La semana pasada, el secretario general del PS, Andrés Santander, se reunió con el presidente de RD, Rodrigo Echecopar, con el objetivo de invitarlo a explorar una eventual alianza programática y electoral. Antes, el dirigente socialista ya se había reunido con el líder del PH, Octavio González.
