Este jueves en diálogo con Radio Cooperativa, la presidenta del Colmed, Anamaría Arriagada, criticó la gestión de fiscalización, que a su parecer, no ha logrado frenar con aquellos doctores que realmente abusarían de la entrega de justificativos.
La dirigente afirmó en base al último informe del Compin que "cuando se habla de los grandes emisores, se trata de once personas que emiten más de 5.000 licencias. El resto de los médicos emiten menos de 200, y algunos emiten más de eso, que son algunas especialidades, como traumatología".
En esa línea, sumó que "el 80% de los médicos da menos de 200 licencias al año. Hay un porcentaje que da más de 1.500, pero hay once emisores que dan más de 5.000 y eso efectivamente es fraudulento, porque no es normal dar como 80 licencias diarias. Sin embargo, un traumatólogo puede dar 1.000 licencias al año".
Arriagada cuestionó también que "la fiscalización draconiana que están haciendo no ha logrado detener a estos grandes emisores, y han aumentado. Hace un año eran siete, y hoy son once. Y nosotros nos preguntamos: ¿Qué están haciendo para identificar a esos 11 que emiten más de 5.000 licencias? Y la respuesta de la autoridad es que no han hecho nada. Eso es lo que nos sorprende".
Según la dirigente del gremio, la entrega de licencias por cotizante habría bajado desde 2023. "Cuando se mira solamente el gasto en licencias, la verdad es que no es un buen indicador, porque también está influido, por ejemplo, por las alzas del sueldo mínimo, por los mayores sueldos de las personas que están cotizando en Fonasa", explicó la dirigente del Colmed.
Arriagada puntualizó que desde el Colegio Médico "no nos negamos a la fiscalización. Sabemos que el gasto por licencias es importante, no es el principal de Fonasa como se dice, que se lleva todos los puntos de la cotización, porque eso tampoco es cierto". En ese sentido, la líder gremial pidió "que la fiscalización sea con criterios claros".
La respuesta del Minsal
Tras conocerse la declaración pública del Colmed, desde el Ministerio de Salud (Minsal) mencionaron a El Mercurio que si bien lamentan la posición del gremio, existe un "diálogo permanente" entre ambos actores.
Además, sostuvieron que se han reunido con la directiva del Colmed, en instancias "donde se han revisado y trabajado sus propuestas" en torno a la fiscalización de licencias médicas.
Según datos entregados al citado medio, en 2024 se habría fiscalizado a cerca de 2.000 médicos que emiten licencias, lo que equivale a un 2,9% de los más de 69.000 profesionales autorizados para entregar los justificativos.
El proceso de revisión "se centró, principalmente, en grandes emisores, pues el 80% de los fiscalizados emitía más de 1.000 licencias médicas anuales", algo que discrepa de la cifra del Colmed, que asegura que el 80% de los médicos emite cerca de 200 justificativos en un plazo de un año.
1.152médicos fueron sancionados por ser "grandes emisores" de licencias en 2024.
Desde el Minsal aseguraron que se sancionó a un total de 1.152 médicos, "lo que demuestra claramente que el espíritu es de un enfoque específico en casos que presentan patrones atípicos de emisión".
Además, afirmaron que el presupuesto del subsidio de incapacidad laboral bordea $3 billones anuales, cerca del 20% del gasto público en salud. En esa línea, las licencias sin fundamentos o irregulares generan un costo de cerca de un 10% del presupuesto para el subsidio.
Consultados por el citado medio, desde la SUSESO afirmaron que las fiscalizaciones se inician "por denuncias efectuadas, ya sea por empleadores, trabajadores, isapres o cajas de compensación, o por antecedentes que como superintendencia recopilamos de posibles licencias médicas otorgadas sin fundamento médico".
Debate abierto
A través de una carta enviada a El Mercurio, Pablo Eguiguren, director de Políticas Públicas de Libertad y Desarrollo (LyD), enfatizó en que "actualmente, Chile destina cerca de un 1% del PIB (y la mitad de la cotización de salud de los chilenos) a financiar las licencias médicas, donde hay un evidente abuso del instrumento".
"Así lo demuestra el hecho de que 309 médicos (0,6%) concentraron licencias por el 9% del gasto total del sistema o que el promedio de días de ausentismo en el sector público sea de 31,3 días, muy por sobre al periodo previo a la pandemia", añadió.
"Es por ello que sorprende que el mismo Colmed no tenga una actitud más propositiva para denunciar a los médicos que se prestan para los abusos del sistema, ni para exponer qué explica el alza en los días de ausentismo ni por qué, tras el sector educación, es liderado por salud", mencionó el director de LyD.
En esa línea, Eguiguren sostuvo que "resolver el abuso en licencias médicas, más allá de la necesaria fiscalización requiere urgentemente cambiar sus reglas. Se necesitan incentivos a contener su uso tal como existen en el resto del mundo: que el beneficio tenga un tope inferior al sueldo limitar la duración de la licencia y que los empleadores asuman parte del costo del beneficio".
A través de una carta enviada al mismo medio, desde el Compin Nacional se sumaron al debate.
Esto, luego de que se dio a conocer el pasado 15 de abril el caso del Dr. Jacobo Numhauser Tognola, médico provinciano de 92 años que recibió una carta para entregar "extensos informes de licencias emitidas, en el caso mío, de 30 en un año calendario".
"Había un plazo de cinco días para apelar, tiempo absolutamente insuficiente. Sin embargo, contratando dos secretarias que me ayudaron logré enviar toda la documentación exigida. Fueron 150 hojas enviadas al link correspondiente", relató el médico.
Pese a eso, fue sancionado por 15 días sin emitir licencias y el pago de 10 UTM ($683.060) "por no enviar la documentación. ¿Qué hacer? Los teléfonos no responden. La Superintendencia de Seguridad Social no recibe reclamos ni documentos en su oficina de partes, y el Compin Metropolitano da solo 15 pases para que el médico apele personalmente y hay que hacer cola a las 06:00 de la mañana. Y dicen, 'debe pagar la multa y después apelar'".
En respuesta, ayer llegó un mensaje de parte de la directora nacional del Compin, Valeria Céspedes, quien expresó que "creemos necesario aclarar que las fiscalizaciones de licencias médicas no son arbitrarias ni persecutorias, sino herramientas fundamentales para proteger un derecho social clave y su mal uso".
"Creemos necesario aclarar que las fiscalizaciones de licencias médicas no son arbitrarias ni persecutorias, sino herramientas fundamentales para proteger un derecho social clave y su mal uso".
Valeria Céspedes, directora nacional del Compin
"Estamos conscientes de que este proceso puede generar dificultades que es necesario abordar, por eso continuamos impulsando mejoras para hacerlo más claro y eficiente", aseguró Céspedes.
Según la directora, hay una modernización de normativa al perfeccionar el modelo de fiscalización, que incluye la ampliación "de plazos de respuesta de 14 días corridos a 17 días hábiles en total".
Además, se estaría desarrollando una nueva página web, "solucionando problemas operativos actuales y facilita la experiencia de usuarios".
También sumó que "se están reforzando las notificaciones, horarios y canales de atención para asegurar una comunicación oportuna y accesible con los profesionales que emiten licencias médicas", y que está en elaboración un nuevo Manual de Contraloría Médica "para estandarizar criterios técnicos".
Sin embargo, desde el Compin no han entregado declaraciones tras las críticas al proceso de parte del Colegio Médico de Chile.