En medio de un tenso y complejo debate, el
Senado aprobó ayer la iniciativa de reforma al sistema político -impulsada por senadores de Chile Vamos y el Socialismo Democrático- y también la que
hace efectivo el voto obligatorio.
En concreto, el sistema político, que ahora revisará la Cámara de Diputados, enfrenta un escenario adverso, ya que un gran número de parlamentarios se oponen a visarla, bajo el argumento de que les perjudica, por lo que incluso -si fuera aprobada-se ve poco probable su entrada en vigor en 2025.
De hecho, el Gobierno anunció que presentará una ley complementaria para darle viabilidad política a la reforma, argumentando que la alta fragmentación en el Congreso es un problema que debe abordarse con urgencia para facilitar acuerdos en materias clave para la ciudadanía.
De acuerdo a El Mercurio, la aprobación de la reforma se logró luego que los senadores lograran aislar a los parlamentarios del Partido Comunista y el Frente Amplio, quienes pusieron varias trabas parlamentarias durante la discusión, lo que dilató la tramitación de la iniciativa.
El texto aprobado cuenta con cinco numerales, los que se aprobaron en particular, incluso superando el quórum requerido de 4/7 (29 votos). El único que se rechazó, tal como quería la oposición, fue el numeral 3, en orden a mantener la inhabilidad para ser candidato a diputado o senador de "las personas que desempeñen un cargo directivo de naturaleza gremial o vecinal".
El resto del articulado tiene cuatro ejes. En concreto, el número 1 habilita al Servel a actualizar, cada 10 años, la asignación de los distritos, lo que no podrá significar un cambio al número de diputados.
En el número 2, se aprobó el nudo de la reforma, al establecer solo los partidos políticos que alcancen menos el 5% de los votos válidamente emitidos a nivel nacional. En la elección de los miembros de la Cámara de Diputados, tendrán derecho a participar en la atribución de escaños en dicha Cámara.
El número 4 -que pasó a ser el 3-, plantea la pérdida del escaño del diputado o senador que renuncie al partido político que hubiere declarado su candidatura. Y cesará en el cargo el diputado o senador independiente que, habiendo sido elegido como asociado a un partido político, se afilie a otro distinto del que hubiera declarado su candidatura. Lo mismo aplica en el caso de dejar su comité.
También se estableció que, de forma transitoria, sólo para las parlamentarias de este 2025, podrán obtener representación parlamentaria los partidos políticos que hayan alcanzado, en la elección de los miembros de la Cámara, al menos el 4% de los votos válidamente emitidos a nivel nacional o escaños suficientes para sumar como mínimo cuatro parlamentarios en el Congreso, entre los eventualmente electos en dicha elección parlamentaria y los senadores en ejercicio que hubieren sido electos por dichos partidos, que continúan en ejercicio hasta la siguiente elección.
Voto obligatorio
En cuanto a la moción para hacer efectivo el voto obligatorio, esta incluye una multa de entre $34 mil (O,5 UTM) a $340.000 (5 UTM).
En el debate, también hubo posturas en contra desde el PC y el Frente Amplio, además de la senadora Alejandra Sepúlveda (ind.- Comité Regionalista). Entre los puntos más complejos, estuvo la aplicación de la norma para todos los electores, incluyendo a los extranjeros avecindados en Chile por al menos cinco años.
Esta sanción por no sufragar, de todos modos, dependerá del impulso que los diputados pongan a la iniciativa, puesto que, hasta ahora, no tiene urgencia por parte del Ejecutivo.