Un amplio operativo policial terminó con la detención de 52 sujetos acusados de ser miembros del brazo financiero del Tren de Aragua, cuyo objetivo era lavar el dinero de la organización criminal trasnacional que fue obtenido mediante ilícitos en nuestro país.
Testaferros, ciptomenedas o cuentas ficticias eran algunos medios utilizados por el grupo delictual, que sacó del país cerca de US$13,5 con destino a Venezuela, Colombia, Estados Unidos, España, entre otros países.
Trinidad Steinert, fiscal regional de Tarapacá, explicó en diálogo con 24 Horas que la investigación surgió a raíz de la detención en territorio nacional de los principales líderes del Tren de Aragua, quien fueron condenados diversos delitos, como el secuestro, homicidios, tráfico de inmigrantes.
En ese sentido, la persecutora sostuvo que estos crímenes eran usados para obtener ganancias ilícitas. En forma paralela a estos delitos, se inició la investigación por el lavado de activos, con el objetivo de localizar dichos montos de dinero.
"Empezamos a ver que, en una primera etapa, los líder del Tren de Aragua ordenaban que estos dineros fueran depositados en personas que abrían cuentas corrientes dentro del sistema financiero chileno y se depositaban los ingresos que eran producto de la comisión de estos delitos: son los presta cuenta", indicó la persecutora.
De los 52 detenidos, 45 son extranjeros y 29 de ellos en situación migratoria regular.
"Depositaban estos dineros en ciertas empresas que crearon en nuestro país para mezclarlas con negocios lícitos", relató Steinert, agregando que tras unir ambos fondos de dinero "se contactaban con determinadas plataformas electrónicas, por ejemplo Binance, quienes realizaban la venta del dinero chileno para sacarlo del país y luego que estuviera en manos de otras personas integrantes de Tren de Aragua en el extranjero".
El prefecto general Hugo Haeger, subdirector de Investigación Policial y Criminalística, dijo ayer en un punto de prensa que se congelaron cerca de 250 cuentas corrientes, además de criptoactivos en diferentes monedas.
El investigador de Libertad y Desarrollo Francisco Alcorta, señaló a El Mercurio que "el método utilizado por esta organización corresponde al denominado 'hormigueo' de movimientos bancarios, una estrategia diseñada específicamente para evadir los mecanismos de detección de operaciones sospechosas", el cual opera con el "uso de testaferros o 'palos blancos' que realizan transferencias por montos reducidos, con el objetivo de eludir los sistemas de inteligencia financiera".
En conversación con T13 Radio, el ministro de Seguridad Pública, Luis Cordero, indicó que "esta operación fue posible utilizando el sistema financiero formal", además de que "tenían perfecto conocimiento de cómo operar, cómo cerrar esas cuentas, cómo constituir sociedades. Por lo tanto, este tipo de estructuras ocupa los sistemas formales y están asesorados para que puedan ser utilizados de esa manera".
Respecto a los US$13,5, la persecutora afirmó que "según mi experiencia no es posible recuperarla".