La realidad virtual avanza.
EFE
BARCELONA.- Este es el escenario: estás dentro de una nave espacial, sobrevolando la superficie de Marte, en un traje de astronauta y con las manos sobre controles. A cada lado hay un compañero. Todos trabajan juntos para evitar una nube de polvo y terminar la misión exitosamente, realizando tareas que requieren de comunicación y coordinación.
Lo que suena como un posible ejercicio de entrenamiento para astronautas es en realidad una demostración de realidad virtual, hecha por el consorcio de ingenieros IEEE y presentada en Mobile World Congress, en Barcelona.
"El juego en sí mismo es simple, pero te entrega un adelanto de un ambiente inmersivo compartido. Si miras hacia el lado, ves a tu compañero, moviendo su cabeza con el visor y tocando los controles. Sienten que están juntos ahí", indica Kevin Curran, miembro de IEEE y profesor de la Ulster University de Irlanda.
La experiencia funciona en base a tres computadores, cada uno conectado a un equipo Oculus Rift, cuyos movimientos son capturados por una cámara, adaptando el contenido en los lentes en base a la posición de la cabeza del usuario.
Según Curran, el programa fue hecho para demostrar las capacidades de la realidad virtual, tecnología que ya está siendo usada para la realización de simulaciones de misiones espaciales. De hecho, se decidió hacer un demo en Marte porque ingenieros de la IEEE participan en estos proyectos y otras misiones espaciales.
Pero, de acuerdo al experto, el cambio que traerá la realidad virtual será aún mayor. "Marcará el paso de la 'internet 1' a la 'internet 2'", declara.
"Si ves las demostraciones, logran suspender la realidad. Actualmente todo está en línea, nuestras compras, los videojuegos, el entretenimiento. Pero todavía es una experiencia plana. Pero con la realidad virtual, cuando la conectes a esta experiencia online, va a transformar todo”, asegura.
Curran dice que esto será posible por todos los avances que se han hecho en el lado técnico de la realidad virtual, que mejoran la latencia y disminuyen el mareo que genera esta tecnología, mejorando la detección de la cara del usuario.
Así, el desafío pendiente es para los creadores de contenido, que "tienen que pensar en llenar todo el espacio y no una pantalla plana con un tamaño previamente definido y limitado".