"Ser famoso no hace a alguien experto en dietas". Ése es el mensaje que este año la Asociación Dietética Británica (BDA, por su sigla en inglés) entregó al divulgar recientemente su lista de "Las 5 peores dietas de celebridades que se deben evitar en 2015".
Todos los años el organismo publica su ranking (
aquí puedes revisar el de 2012) en una época clave, cuando todos piensan en la idea de "año nuevo, cuerpo nuevo" y se tientan fácilmente con libros de dieta o DVDs de entrenamiento físico protagonizados por celebridades. La lista es elaborada sobre la base de los llamados telefónicos que recibe la BDA durante el año, consultando sobre los diferentes regímenes y la veracidad de sus promesas.
"Parece que como nación estamos constantemente en la búsqueda de una receta mágica para perder peso, deseando una solución rápida que nos dé los cuerpos que frecuentemente vemos en televisión, en las revistas de moda o en los carteles que adornan de arriba a abajo al Reino Unido", sostuvo Sian Porter, vocera del organismo, al dar a conocer el listado de este año.
Y aunque la referencia es directa al país europeo, es algo que sin duda se puede extrapolar al resto del mundo, sobre todo cuando se trata de imitar lo que hacen las celebridades para lograr sus "cuerpos perfectos" lo que, según Porter, tiene su precio tanto para la salud como para el bolsillo.
"Cuando quieran perder algo de peso, no piensen en hacer dieta o sólo en los cambios que necesitan hacer durante uno o dos meses para adelgazar. Piensen en los cambios que necesitan hacer de manera permanente para perder ese peso y, lo más importante, no recuperarlo", recomendó la vocera, quien también es nutricionista.
Bajo este punto de vista, las 5 dietas que este año fueron destacadas como las peores por los expertos de la BDA, son las siguientes:
- Terapia de la orina: también conocida como orinoterapia o uroterapia, consiste en beber la propia orina con fines cosméticos o de bienestar. Según algunos, la urea contenida en la orina tiene un efecto anti cáncer. Sin embargo, según el organismo británico esta dieta no está respaldada por ninguna evidencia científica y su seguridad tampoco ha sido establecida.
- Dieta Paleo: otros nombres que ha recibido son Dieta del Paleolítico, Dieta del Cavernícola y Dieta de la Edad de Piedra. Consiste en
consumir únicamente los alimentos que los neandertales tenían a su disposición en la época prehistórica, y excluir todos los demás tales como lácteos, granos, azúcar, legumbres, etc. Y aunque la BDA considera que eliminar las comidas procesadas o el azúcar de la dieta en realidad es una buena idea, afirma que no es recomendable eliminar grupos alimenticios a menos que sea por recomendación médica. "Una dieta desequilibrada, que consume tiempo y lleva al aislamiento social, como fácilmente puede ser ésta, es una forma de desarrollar deficiencias de nutrientes que puede comprometer la salud y la relación con la comida", sostuvo el organismo.
- Dieta Libre de Azúcar: quienes la siguen
eliminan de su régimen alimenticio todos los tipos de azúcar y, muchas veces, también los carbohidratos. Sin embargo, los expertos de la BDA afirman que es prácticamente imposible no consumir azúcar, porque también habría que excluir de la dieta algunos vegetales, frutas, productos lácteos, etc. Asimismo, algunos sustitutos de ella como el agave o
la miel, en realidad son otra forma de azúcar.
- Dieta VB6 (Vegan Before 6 pm): consiste en seguir un régimen vegano hasta antes de las 6 pm, es decir, una alimentación rica en vegetales, frutas, cereales integrales, frutos secos, etc. Algo bastante positivo, según la BDA, de no ser porque después de esa hora no existen límites, lo que significa que quienes siguen esta dieta tienen plena libertad para consumir alimentos con muchas calorías y grasas saturadas, así como también ricos en azúcar y sal. "La realidad es que, en términos de la salud, no importa comer alimentos de diferentes grupos a distintas horas del día. El equilibrio nutricional es lo importante", señaló el organismo.
- Dieta de la arcilla: su objetivo es limpiar el organismo de toxinas, impurezas y químicos. ¿Cómo? Tomando todos los días un vaso de agua con
una cucharada de arcilla diluida en ella. Sin embargo, diversos especialistas han advertido sobre los potenciales riesgos que esta práctica puede tener para la salud, en especial por los altos niveles de arsénico y plomo presentes en la arcilla. “Toda la idea de la desintoxicación no tiene sentido. El cuerpo es un sistema bien desarrollado que tiene incorporado su propio mecanismo para desintoxicar y remover desechos y toxinas", establecieron los expertos de la BDA.
