HAMBURGO.- El portero de la selección alemana de fútbol Oliver Kahn fue elegido en una encuesta que publica hoy la revista alemana Bildwoche la figura más penosa de Alemania por sus exabruptos en la cancha y sus idas y venidas amorosas.
Un 39 por ciento de 1.001 personas consultadas se inclinaron por el guardameta del Bayern Múnich.
Kahn ocupa casi permanentemente los titulares de los diarios ya sea con notas del corazón tras separarse de la madre de sus hijos y unirse a una joven camarera de una discoteca de moda o por sus entredichos con el otro arquero del once germano, Jens Lehmann.
El conflicto con Lehmann por la titularidad en el combinado de Alemania volvió al tapete al recibir Kahn un fuerte respaldo del técnico del Bayern, Felix Magath, y de su entrenador personal, el mítico Sepp Maier.
"La situación de Oli Kahn es mejor de lo que parece. Si alguien tiene que estar nervioso, ése es Jens Lehmann", cita hoy a Magath el rotativo muniqués Abendzeitung.
"Oli es y seguirá siendo el número uno. Y Jens tiene que cuidarse, que de lo contrario acabará siendo el tercero", lo secundó Maier, quien pagó sus declaraciones públicas a favor de Kahn con el despido de la selección por parte del nuevo entrenador alemán Jürgen Klinsmann.
Klinsmann advirtió que no hay garantías de titularidad. "Kahn es el número uno, pero con competencia", sostuvo el técnico días atrás.
"Lehmann es quien lo desafía y hace reclamos legítimos, pero deberá ser más cauto con lo que dice y demostrar su calidad en el campo", instó Klinsmann al portero del campeón inglés, el Arsenal de Londres, que volvió a caldear los ánimos semanas atrás anunciando el "fin de la era Kahn" y su futuro como titular en el Mundial de 2006.
