Mark González no sólo marcó, también recibió una tarjeta amarilla por falta.
AP
SANTIAGO.- Poco más de cuatro meses llevaba Mark González sin jugar un partido oficial. El volante se lesionó jugando por Chile el 10 de octubre del año pasado en el duelo ante Colombia.
Este miércoles volvía a juigar por los puntos por su equipo, el CSKA de Moscú. Y vaya manera de regresar.
El cuadro ruso perdía como local 0-1 (gol de Alvaro Negredo a los 25') hasta que apareció el ex Universidad Católica para igualar el partido válido por los octavos de final de la Liga de Campeones.
El chileno tomó la pelota pasado la mitad de cancha, corrió unos cinco metros con ella, le da desde 35 metros al arco y a cobrar. Nada que hacer el portero español que solo miró el balón.
Fue el único tanto de los rusos y el 1-1 final que le da chances al cuadro de González para la vuelta el 16 de marzo y buscar en España el paso a los cuartos de final de la Champions.
Y en España rescataron de inmediato que un ex jugador de Betis amargó la tarde a Sevilla.
González estuvo en Betis entre 2007 y 2009, y conoció de primera mano la tremenda rivalidad que existe entre los dos equipos de Sevilla.
El chileno abandonó el cuadro español tras el descenso del club a la segunda división, pero el destino quiso que pudiera tomarse su particular venganza con la camiseta del CSKA.
González, que ha jugado en el Liverpool y en la Real Sociedad, entre otros equipos, presentó así su tarjeta de visita de cara al Mundial de Sudáfrica, en el que Chile está en el mismo grupo que España.