No levanta cabeza.
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SANTIAGO.- La U está en un pozo. El cuadro universitario no ha obtenido los resultados esperados bajo el mando de Marco Antonio Figueroa y las dificultades comienzan ya a traspasar lo que ocurre sólo en cancha.
Resulta que debido al régimen de concentración que impuso el técnico de cara al duelo del martes ante Real Potosí por la Copa Sudamericana surgió el primer conflicto interno entre los jugadores y el cuesionado DT del elenco laico.
Según publica El Mercurio este domingo, debido a la importancia del duelo, el entrenador azul pidió al plantel quedar concentrados hasta el día del encuentro en el Estadio Nacional. La idea no cayó bien en los futbolistas, quienes reclamaron por la medida.
Quien tomó la palabra fue el capitán José Rojas, quien habría tenido un intercambio de opiniones con el técnico. El defensa le habría dicho al estratego que era "exagerada" la decisión y que los malos resultados no justificaban tamaña medida.
Figueroa habría escuchado las quejas del plantel y prometió que les daría libre si ganaban a Palestino. Como esto no ocurrió, el equipo se mantendrá enclaustrado y los jugadores con el ceño fruncido.
Cabe recordar que Universidad de Chile empató 1-1 ante Palestino este sábado, quedando aún sin triunfos en el Torneo Nacional y con un cuestionado Marco Antonio Figueroa que sólo ha ganado un partido de los siete que ha dirigido.
