MADRID.- Los toxicómanos podrán desde hoy inyectarse droga, bajo supervisión médica, en una "narcosala" habilitada en un poblado de España, en el marco de un proyecto similar a otros existentes en Holanda y Suiza.
La polémica iniciativa está auspiciada por el gobierno regional, del Partido Popular (PP) del premier José María Aznar.
Se prevé que más de cien toxicómanos pasarán a diario por la sala, donde se les facilitará jeringas nuevas y material esterilizado para inyectarse en presencia de un equipo de médicos que analizará previamente la dosis.
Las condiciones para tener acceso a esta instalación son ser mayor de edad y entrar en la sala con una única dosis. Además ningún heroinómano podrá tener contacto físico con otro.
La "narcosala" -de 200 metros cuadrados, con diez cabinas- está situada en el poblado Las Barranquillas, considerado el principal "hipermercado" de venta de drogas de Madrid. Según datos de la policía, unos 4.000 toxicómanos acuden a abastecerse de droga cada día al poblado.
De ellos cerca de un centenar tienen años de adicción, sin hogar y no acuden a centros de drogadependientes. Para ellos está pensada especialmente la sala.
El objetivo, según los responsables, es disminuir la transmisión del sida, hepatitis y otras enfermedades.
El proyecto costó 138 millones de pesetas (unos 766.000 dólares).