BOGOTA.- La policía secreta de Colombia desmanteló una red de tráfico de armas que tenía previsto introducir en el país unos 50.000 fusiles, cohetes y lanzaderas, mediante una operación internacional coordinada con Estados Unidos e Israel que llevó al arresto de cuatro israelíes y un colombiano.
Un año dedicaron los servicios secretos de los tres países a la investigación que les permitió desarticular esta banda, que según las autoridades de Colombia, actuaba en Austria y Rusia, y mantenía contactos en cinco países latinoamericanos.
El Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, la policía secreta colombiana) informó hoy en Bogotá de que la red también estaba relacionada con el mercenario israelí Yair Klein.
El desmantelamiento de la red fue detallado a los periodistas por el director del DAS, el coronel Germán Jaramillo, quien resaltó que tres de los traficantes, entre ellos dos israelíes, fueron detenidos en Cali, ciudad del suroeste colombiano.
Los dos miembros de la red detenidos en Israel fueron identificados como Yaron Cohen, de 55 años, y considerado como "correo" internacional de la banda, y David Lipman Birembaum, de 51, que según el DAS, es una "persona muy respetada en Tel Aviv" y contaba con una licencia para comprar armas.
La policía secreta colombiana aseguró que esta organización proyectaba introducir en Colombia 50.000 fusiles de los tipos AKM -que, según el DAS, es una versión nueva del AK-47-, R-15 y Galil, además de ametralladoras M-60, cohetes antiaéreos y antitanques -de los tipos Scorpio y Steria-, lanzaderas para granadas MGL y cohetes RPG, chalecos antibalas y municiones.
Las armas tenían como destino el mercado negro del que se proveen los grupos rebeldes involucrados en el conflicto interno del país.
