PARIS.- El Concorde de Air France, bloqueado desde hace dos meses en el aeropuerto de Nueva York, aterrizó hoy jueves en París a la hora prevista, tras obtener un permiso especial de repatriación extendido por la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) francesa.
"Ha aterrizado exactamente a las 17.31 (15.31 GMT). Todo se ha desarrollado perfectamente y ha invertido tres horas y veintitrés minutos en el trayecto" Nueva York-París, explicó la portavoz de Air France, quien dijo que vio cómo se posó el "pájaro supersónico" en una de las pistas del aeropuerto de Roissy-Charles-de-Gaulle.
Air France, que inmovilizó en tierra todos sus aviones supersónicos a mediados de agosto después de que en julio se estrellase uno de ellos en las afueras de París, había anunciado hoy que el Concorde aterrizaría, entre las 15.15 y las 15.45 GMT, en el aeropuerto de la capital francesa.
El aparato evitó sobrevolar la localidad de Gonesse, en las afueras de París, donde cayó el pasado 25 de julio un Concorde de Air France, apenas dos minutos después de despegar del Roissy, lo que provocó la muerte de los 109 ocupantes del vuelo y cuatro personas en tierra.
La Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) francesa dio el 11 de septiembre un permiso provisional a Air France para repatriar el Concorde bloqueado en Estados Unidos.
Las autoridades de los países que el aparato ha sobrevolado en su camino de vuelta a casa -EE.UU., Canadá, Irlanda y Reino Unido-, también tuvieron que conceder permisos especiales de vuelo.
Una de las condiciones contempladas en esa autorización era que el aparato no sobrevolase Gonesse, por petición expresa de las autoridades locales.
En este vuelo excepcional, que puede ser el último del "pájaro supersónico", orgullo de la ingeniería franco-británica a lo largo de tres décadas, sólo viajaron dos pilotos y tres técnicos.
Sin embargo, el ministro francés de Transportes, Jean-Claude Gayssot, reiteró hoy que Francia "no tiene la intención de terminar con el Concorde".
Las autoridades de aviación civil de Francia y Reino Unido suspendieron el certificado de vuelo de los doce Concorde existentes (siete de British Airways y cinco de Air France) a mediados de agosto pasado, a raíz del siniestro.
El objetivo de la repatriación del aparato es, según la compañía francesa, "mantener este avión, al igual que los otros cuatro (Concorde) de la flota de Air France, en las condiciones óptimas, que sólo los servicios de mantenimiento de la compañía en Roissy-Charles-de-Gaulle pueden ofrecer".
Ante la asamblea general de accionistas, el presidente de Air France, Jean-Cyril Spinetta, reiteró ayer en París su deseo de que el Concorde reanudase sus vuelos regulares lo antes posible.
Indicó que los constructores del avión supersónico deberán analizar las causas del accidente del 25 de julio, para concretar las modificaciones necesarias que hagan posible que vuelva a volar en buenas condiciones de seguridad.
El reventón de un neumático del Concorde, originado por una lámina metálica presuntamente caída del motor de un DC-10 de la compañía estadounidense Continental Airlines que despegó poco antes que el avión siniestrado, produjo una reacción en cadena que condujo al aparato a estrellarse apenas dos minutos después de despegar.
No obstante, la cuestión de cómo se desencadenó el incendio en uno de sus motores es todavía un misterio.