GENERAL SANTOS, Filipinas.- Rebeldes musulmanes armados con granadas y rifles de asalto atacaron una cárcel urbana en el sur de Filipinas y liberaron a 68 prisioneros, incluso a varios comandantes subversivos, informó la policía el martes.
Un prisionero murió mientras que tres guardias y dos civiles resultaron heridos en el ataque ocurrido la noche del lunes en la cárcel de la ciudad de General Santos que albergaba a unos 400 reclusos, agregaron.
El asalto fue llevado a cabo por unos 100 guerrilleros del Frente Moro Islámico de Liberación, el mayor grupo separatista musulmán que lucha por un estado separado en el sur del país principalmente católico.
La policía dijo que los rebeldes dispararon granadas impulsadas por cohetes para perforar la cerca de hormigón que rodea el penal y volaron los candados de los portones que llevan al edificio principal y a las galerías con mazos y balazos.
Los 20 guardias intercambiaron disparos con los atacantes, pero no pudieron impedir que entraran a las galerías para liberar a sus camaradas.
