CARACAS.- El vicepresidente de Venezuela, José Vicente Rangel, afirmó hoy que la oposición intenta repetir el "libreto" golpista del 11 de abril de 2002, cuando el mandatario Hugo Chávez fue sacado del poder por 48 horas.
Al respecto, señaló que algunos "golpistas y aventureros" pretenden utilizar una marcha convocada para el sábado hacia el Consejo Nacional Electoral (CNE) para provocar desórdenes y luego "pasar a la ofensiva".
Rangel dijo: "(Mientras la manifestación sea pacífica) no hay problema, pero todo indica, de acuerdo con informaciones que tenemos, que se pretende utilizar el mismo formato del 11 de abril (de 2002)".
"Pretenden una marcha para crear confusión, lograr unos muertos y de esta manera pasar a la ofensiva. El gobierno está totalmente prevenido, ha tomado todas las medidas de seguridad, porque lo que ocurrió en abril no se va a repetir", dijo a los periodistas.
La oposición está llamando a una marcha hacia la sede del CNE para pedir que se respeten las 3,4 millones de firmas presentadas para solicitar un referéndum revocatorio del mandato de Chávez.
La convocatoria sigue adelante, a pesar de que en los alrededores del CNE hay grupos de simpatizantes del gobierno acampando desde hace días y de que para el sábado el gobierno organizó un mercado popular en la ruta de la marcha.
La concentración busca presionar al CNE para que emita un resultado sobre el proceso de verificación de las firmas, aunque el organismo electoral puntualizó que para mañana no anunciará una decisión.
Según Rangel, la marcha del sábado será utilizada como un tercer intento golpista luego de los sucesos del 11 de abril de 2002 y de la huelga general de hace un año.
"El 11 de abril, utilizando una marcha cívica, se asestó un golpe a la Constitución. En la huelga de diciembre de ese año pasó lo mismo. Ahora, con el pretexto del referéndum, que es una figura cívica impecable, hay gente desesperada porque no recogieron las firmas y se pretende utilizar esa frustración para provocar desórdenes e ir por el tercer golpe", recalcó.
Agregó que el gobierno evitará ese tercer intento y pronosticó que "lo que habrá será una nueva derrota para los que pretenden desconocer el orden constitucional".
Rangel señaló que dirigentes de la oposición están amenazando con ir al CNE y luego avanzar hacia el palacio de gobierno de Miraflores, pero advirtió que serán repelidos "con toda la fuerza del Estado democrático".
Agregó que el gobierno no tolerará "absolutamente nada" que afecte el orden constitucional y que ponga en riesgo la seguridad y la vida de los ciudadanos.
El 11 de abril de 2002 una marcha opositora fue desviada de su ruta original e intentó llegar a la sede presidencial, pero a pocos metros fue atacada a tiros. Los hechos provocaron un movimiento militar que desconoció a Chávez y lo sacó del poder por unas horas.