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Japón instalará sistema de alerta en zona afectada por tsunamis

El sistema tendrá un costo de US$4 millones para el gobierno japonés.

12 de Enero de 2005 | 07:45 | EFE
TOKIO.- Japón se comprometió hoy a sufragar un sistema de alerta de tsunamis en el océano Indico y anunció el envío de tres navíos más de su Armada, con helicópteros y equipos médicos, a la zona asolada por el maremoto del 26 de diciembre.

La solidaridad con las víctimas del sismo ocurrido en Sumatra se ha convertido en una prioridad de estado en Japón, cuyos habitantes saben bien lo que significa vivir bajo la constante amenaza de terremotos y tsunamis.

De momento, Tokio ha comprometido más de 500 millones de dólares en ayuda humanitaria, a repartir entre los países del Golfo de Bengala, cuyas costas fueron devastadas, y los organismos internacionales que cooperan en la asistencia a las víctimas y reparación de los daños materiales.

Un nuevo gesto de buena voluntad lo ofreció el Gobierno japonés hoy al anunciar que destinará cuatro millones de dólares para la creación de un sistema de alerta en el Indico que permita prever la formación de las olas gigantes provocadas por sismos.

El ministro portavoz, Hiroyuki Hosoda, dijo que esa partida provendrá de los 250 millones de dólares que Japón se ha comprometido a entregar a organizaciones internacionales, entre ellas la ONU, para ayudar a la reconstrucción de las zonas afectadas por el citado maremoto.

Ayer, el ministro de Finanzas de Japón, Sadakazu Tanigaki, prometió en Manila la entrega de otros 40 millones de dólares (que se suman a los citados 500 millones) para paliar los daños del sismo y los posteriores tsunamis, cuyo trágico balance provisional supera ya las 150.000 víctimas mortales.

"Japón ayudará en los trabajos de reconstrucción y rehabilitación de los países afectados de todas las maneras posibles", afirmó Tanigaki.

De los 250 millones de dólares que Japón destinará a organismos internacionales embarcados en la recuperación de las zonas asoladas, se incluyen 70 millones de dólares para UNICEF, dijo el viceministro de Asuntos Exteriores nipón, Shuzen Tanigawa.

Añadió que se entregarán otros 60 millones de dólares al Programa Mundial de Alimentos, 25 millones a la Organización Mundial de las Migraciones y 24,5 millones de dólares al Programa de Desarrollo de la ONU.

La ayuda destinada por Japón a la creación de un sistema de alerta de tsunamis corresponde a la mitad del coste mínimo apuntado por la ONU para sacar adelante tal dispositivo.

El programa internacional de la ONU para la reducción de desastres naturales ha sugerido ya que se puede poner en marcha un sistema de alarma de maremotos valorado en 20 millones de dólares, mucho más efectivo y rápido.

Está previsto que el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, dé más detalles sobre el sistema de alerta y otros proyectos de la ayuda nipona durante la conferencia sobre reducción de desastres que la ONU celebrará entre el 18 y el 22 de enero en Kobe, ciudad de Japón asolada por un destructor terremoto hace diez años.

Además de la ayuda financiera, Japón ha movilizado a sus Fuerzas de Autodefensa, como se conoce aquí al Ejército, en ayuda de sus vecinos del sur de Asia.

Este paso ha dado al Gobierno de Koizumi la oportunidad para subrayar la necesidad de que los militares japoneses tomen parte en misiones internacionales.

Tal doctrina entra en contradicción con la Constitución pacifista nipona, que prohíbe la participación de militares japoneses en conflictos ajenos, pero el Gobierno se ha apresurado a indicar que las operaciones en el exterior sólo serán de paz y humanitarias.

De momento, Tokio ha prometido el envío a varios países del Indico de un millar de soldados para que ayuden en las tareas de limpieza, prevención de epidemias y reconstrucción básica.

Como parte de este plan, hoy zarparon de su base en Yokosuka, al sur de Tokio, dos buques de guerra rumbo a Sumatra con 345 hombres a bordo y equipos médicos para apoyar con su logística a los militares japoneses que trabajen en tierra.

Uno de los barcos, el buque "Kunisaki", de 8.900 toneladas, cuenta con cinco helicópteros y dos aerodeslizadores para desembarco de vehículos, personal y equipos.

El viernes próximo zarpará de Nagasaki el destructor "Kurama", con una tripulación de 330 hombres, también con destino a Indonesia, donde ya recalaron hace diez días otros dos destructores japoneses que participaron en las primeras tareas de ayuda.

Además, cien soldados japoneses se encuentran en la base Utapao de Tailandia, donde participan en tareas de aprovisionamiento con un avión de transporte militar C-130.