BOGOTÁ.- A puertas cerradas se reunieron ayer, jueves, el Mandatario colombiano, Álvaro Uribe, y el Papa Benedicto XVI, en una cita que se extendió por media hora y donde se trató sobre la participación de la Iglesia Católica en la pacificación del país sudamericano.
En un comunicado consignado por el diario "La Opinión de Colombia", el Vaticano calificó el encuentro como “cordial", asegurando que la entrevista “permitió un fructuoso intercambio de opiniones sobre temas coyunturales de actualidad internacional y regional".
"Bienvenido Señor Presidente” le dijo en español el Sumo Pontífice a Uribe, al inicio de la reunión, donde “se examinaron temas como el narcotráfico, las políticas sociales para mejorar las condiciones de vida de las poblaciones más pobres y también la colaboración entre Iglesia y Estado con el fin de consolidar la pacificación nacional", sostiene el comunicado.
Uribe, quien permanecerá un solo día en Italia y el Vaticano, solicitó la audiencia a inicios de año tras pedir la mediación del mismo Papa y de la Santa Sede con la guerrilla de las Farc para la liberación de un grupo de seis secuestrados.
El máximo representante de la Iglesia Católica se pronunció en numerosas ocasiones por la paz en Colombia y contra la violencia que azota desde hace más de 40 años a este país.