LUXEMBURGO.- La Presidencia checa de la Unión Europea confió en lograr hoy un acuerdo unánime sobre el marco común para acoger a "varias docenas" de detenidos de Guantánamo y ayudar a Estados Unidos a cerrar ese centro.
"Confío firmemente en lograr un acuerdo", señaló el titular checo del Interior, Martin Pecina, al llegar al Consejo de Ministros comunitario que debe tomar la decisión.
El acuerdo "interesa a todos los Estados miembros" de la UE, ya que permitirá que cada uno de los Veintisiete negocie directamente con Estados Unidos la acogida, añadió Pecina.
Aunque el número de detenidos recibidos en Europa depende del resultado de las conversaciones entre cada país con Washington, el ministro checo avanzó que el total podría alcanzar "varias docenas".
El comisario europeo de Justicia y Seguridad, Jacques Barrot, recordó que el marco que se prevé aprobar hoy permite que los países intercambien información sobre los detenidos que acojan, a fin de confrontar los temores de algunos países sobre posibles peligros a su seguridad.
Barrot recordó que este acuerdo permitirá a la UE cooperar con EE.UU. en una lucha antiterrorista "liberada de todos los errores que hemos denunciado", en referencia a la creación y mantenimiento del centro de detención de Guantánamo.
El ministro sueco de Inmigración y Asilo, Tobias Billstrom, cuyo país asumirá la presidencia de la UE dentro de tres semanas, recalcó que el cierre de Guantánamo "es primariamente un asunto de EE.UU" ya que "fueron ellos quienes lo crearon".
Sin embargo, dijo que si algunos países de la UE quieren acoger detenidos, pueden hacerlo "e forma individual"con el mecanismo que se prevé aprobar hoy.
El documento no es vinculante jurídicamente pero sí da una cobertura política de la UE a la acogida de algunos de los aproximadamente 240 detenidos que siguen en Guantánamo.
El texto señala que los países que reciban a detenidos "tendrán en cuenta las preocupaciones de orden público y seguridad" de sus socios europeos.
Los países europeos admitirían dentro de este paraguas únicamente a detenidos de los que EE.UU. considere que se pueden liberar porque no tiene pruebas en su contra.
Además, irían sólo a los países europeos que lo deseen y dentro de un sistema de intercambio de información sobre su identidad, motivos por los que fue internado en Guantánamo y lugar de residencia en la UE, y con evaluaciones periódicas sobre su integración.
También se da por hecho que los países de acogida podrían poner en marcha medidas de seguridad en torno a los ex detenidos y es posible que algunos Estados comunitarios soliciten que se les restrinja la libertad de circulación.
El ministro alemán del Interior, Wolfgang Schäuble, declaró que la posibilidad de prohibir a los detenidos los viajes por otros países de la UE "no es una opción por ahora", pero sí insistió en que "no hay que crear riesgos para la seguridad".
Hasta ahora, al menos nueve países de la UE se han mostrado dispuestos a acoger a algunos de los detenidos, a fin de buscarles una salida humanitaria y ayudar al presidente de EEUU, Barack Obama, a cumplir su compromiso de cerrar el centro de detención de Guantánamo para comienzos de 2010.
Alemania es uno de los países con interrogantes, ya que mientras el ministro de Exteriores, el socialdemócrata Frank-Walter Steinmeier, se ha mostrado a favor de acoger a algunos detenidos, mientras que Schäuble está en contra.
"Lo examinaremos si hay una petición concreta de Estados Unidos", dijo el ministro alemán del Interior.