Francia se apodera de la escena
La Orquesta Filarmónica ofrecerá hoy un programa consagrado a Héctor Berlioz, y también se incluirá una obra del compositor chileno Alfonso Letelier.
Víctor M. Mandujano 12/3/2004
El pasado 11 de diciembre se conmemoraron 200 años del nacimiento del compositor francés Héctor Berlioz. Chile no pareció enterarse del suceso. Ni de las lujosas ediciones discográficas que refrescaron su genialidad ni de los homenajes que las principales orquestas y directores del mundo realizaron en el "Año Berlioz".
Pero, como más vale tarde que nunca, la Orquesta Filarmónica del Teatro Municipal dirigida por su titular, Maximiano Valdés, inicia hoy, a las 19:00 horas, su Temporada de Conciertos homenajeando el bicentenario del natalicio de Berlioz y el décimo aniversario de la muerte del compositor chileno Alfonso Letelier, de quien se ofrecerá "Suite Aculeo" (1956).
Del compositor galo se interpretará "Sinfonía Fantástica" (1830), uno de los modelos orquestales de todas las épocas, y el ciclo de canciones "Nuits d''''eté" (1841), con la participación de la mezzosoprano Graciela Alperyn.
El amor y la nostalgia protagonizan este concierto, que se repetirá el lunes. El amor se traduce en la turbulenta relación de Héctor Berlioz con la actriz irlandesa Harriet Smithson, mientras que la nostalgia surge de los paisajes de la Laguna de Aculeo, lugar de meditación y descanso de Alfonso Letelier.
Maximiano Valdés revela algunas claves para llegar al espíritu de la Sinfonía: "La música de Berlioz está detallada al máximo en la partitura. No obstante, en este caso las indicaciones no son suficientes para retratar una sinfonía tan peculiar, cuya música sigue poniendo de manifiesto la portentosa imaginación de Berlioz. Hay que entrar en el mundo de las pasiones más desenfrenadas para traducir este sueño. El punto de equilibrio está entre la fantasía y lo que se escribe en la partitura".
- Una década separa a la Sinfonía Fantástica de ''Nuits d''eté''. ¿Se percibe una mayor madurez compositiva?
"En la época de la Sinfonía Fantástica, la madurez de Berlioz era total. ''Nuits d''eté'' es una obra mucho más íntima, basada en poemas de Théophile Gautier. Desde el punto de vista de la unión entre texto y música, es simplemente extraordinaria. La expresividad en Berlioz no radica siempre en la belleza de la melodía, sino que muchas veces en el gesto traducido a los instrumentos".
- ¿Cómo percibe la obra de Alfonso Letelier?
"Me quedé un poco sorprendido cuando empecé a leerla. Sabía - porque lo conocí personalmente- que era un hombre de mucha profundidad, inclinado hacia lo dramático. En tal sentido, esta obra refleja muy bien lo que él fue. Aculeo era mucho más que su lugar de vacaciones o su casa de campo. El ''Horcón de piedra'' (primer movimiento) es una montaña rocosa en el camino a Alhué, que a él lo impresionaba mucho. En el último movimiento, ''El lago'', hay un gran impresionismo y un estilo similar al de Ginastera, con una búsqueda de efectos armónicos. Esta suite es de las mejores piezas del repertorio chileno que he dirigido. Es obscura, un poco triste, pero termina de manera muy diáfana y refleja la maestría que Alfonso Letelier tuvo en el trabajo compositivo y en el trato orquestal".
