Benny Moré.
LA HABANA.- Cuba recordó este miércoles el 86° aniversario del nacimiento de su mejor músico de todos los tiempos, Benny Moré, verdadero "bárbaro del ritmo", con una peregrinación a su tumba en Santa Isabel de las Lajas, donde nació, y un intenso programa para todos los bohemios de La Habana.
Como cada año para festejar el natalicio o conmemorar su muerte, una banda de músicos acompañó en horas de la mañana la romería del pueblo de Santa Isabel de las Lajas para entonar por las calles y al pie de su sepultura canciones de su ídolo.
Amigos, familiares, artistas y medios de prensa destacaron la calidad excepcional, como músico y como persona, del famoso cantante de renombre mundial, quien tuvo una vida desenfrenada, y murió en 1963 a los 44 años de cirrosis hepática.
"El Bárbaro del Ritmo"
Aunque se hará un gran festejo en el XV Festival Internacional de Música Popular, del 12 al 17 de septiembre en Cienfuegos y Lajas, la Promotora Musical Benny Moré celebrará el natalicio con jornadas de música, baile y trago en varios bares de La Habana, como el Alí Bar, donde él actuaba y descargaba su genio musical.
Conocido en Cuba como "El Bárbaro del Ritmo", Benny Moré fue igualmente completo en el son, el bolero y la guaracha. Son memorables, de su extenso cancionero, "Como fue", "Tú me sabes comprender", "Bonito y sabroso", "La culebra", "Y hoy como ayer".
Mujeriego empedernido, Benny debe su título a una muchacha cuando le dijo en una ocasión: "¡Qué bárbara tú eres!". Alguien que estaba al lado le dijo "No, el bárbaro es usted por lo bien que canta", y así se quedó: El Bárbaro del Ritmo.
"Se habla mucho de él como músico, pero hay que hablar de Benny como humano, gran amigo, gran compañero", comentó este miércoles Lázaro Valdés, quien tocó con la orquesta de Benny Moré de 1958 a 1963, en los últimos años de vida del músico.
Genio innato
Benny Moré era un verdadero genio de la música. Pese a que nunca fue a una academia, y anduvo errante por calles y parques en los primeros años de su vida artística, tenía un oído prodigioso que no necesitaba pentagrama, una voz particular y un ritmo que fluía en el baile con toda espontaneidad.
"Era un músico empírico. El venía al oído en el momento de la actuación y te cambiaba el
tumbao de los saxofones. Era un genio", añade Valdés, quien este miércoles recordó varias anécdotas de la vida de Benny Moré.
Nacido un 24 de agosto de 1919 en Santa Isabel de las Lajas, en la central provincia de Cienfuegos, el mítico cantante anduvo desde el inicio con una primera guitarra hecha por él con un trozo de yagua -de fibra de palma- y ligas -caucho-, en vez de cuerdas.
En 1940 se traslada hacia La Habana para deambular por portales y parques en las noches de bohemia, hasta que cinco años después viajó a México con una agrupación musical, hasta que se unió más tarde con el rey del mambo Dámaso Pérez Prado, con quien alcanzó la cumbre de la fama.
Filme biográfico
Su vida turbulenta y de excesos inspiró al cineasta cubano Jorge Luis Sánchez, quien ya terminó de rodar la película "Divina desmesura", un acercamiento a los sucesos más significativos de la existencia del músico, con quien tiene parentesco.
"La película está en la etapa final de postproducción, se está mezclando la música y esto supone un trabajo exhaustivo. La música es un gran personaje dentro de la película. Esperamos que esté lista para finales de año", declaró Sánchez, en entrevista con la AFP.
Para el cineasta, hacer un filme de Benny Moré supone gran responsabilidad. "Se trata de una figura de primer orden en la cultura musical de este país, y la familia ha confiado en mí".
"El es un patrimonio que yo tampoco puedo coger y hacer cualquier cosa, esta película no puede quedar ni regular, tiene que quedar bien, y estoy contento con lo que está saliendo. No tengo que esconder la cabeza", añadió.
En su película, Sánchez lo quiere mostrar como quien era: "Oyes sus canciones y sientes muchas cosas, la nobleza, la rabia, el amor. Ni bueno ni malo, humano. Nuestra cultura tiende a presentarlo como un ángel, pero tenía su diablo".
