Fundador de Los Ángeles Negros analiza con dureza el quiebre de sus ex compañeros

SANTIAGO.- Una verdadera teleserie es la que Los Ángeles Negros han protagonizado durante cerca de 40 años. Primero con el quiebre de una de las agrupaciones más importantes de la música popular chilena, y luego con los conflictos entre sus ex integrantes y la multiplicación de grupos que interpretan su repertorio.

Pero cuando las disputas parecían quedar en el olvido, la reunión de la formación más emblemática del conjunto volvió a revivirlas. Primero con Mario Gutiérrez, guitarrista y fundador, alegando haber sido excluido de la iniciativa. Luego, con la infinidad de postergaciones del concierto de regreso y, más recientemente, con el quiebre de la agrupación reunida y el anuncio de un nuevo proyecto por parte de los tres músicos, sin el cantante Germaín de la Fuente.

Gutiérrez —quien mantiene vivo el nombre del grupo en México— tomó palco en esos últimos episodios, y simplemente fue un espectador de un conflicto que, según dice, veía venir apenas la reunión fraguó. "Es muy obvio lo que está ocurriendo, siento que no hay nada nuevo bajo el sol. El pleito fue el común denominador entre ellos desde el comienzo", comenta desde el país en que reside, y recordando los primeros años de sus ex compañeros en Los Ángeles Negros.

"Hace 40 años atrás, cuando Germaín se peleó con (Luis) Ortiz, ya estaban los problemas económicos que pensaba Germaín", dice sobre las supuestas mayores aspiraciones de dinero del vocalista del grupo, tema que hoy vuelve a estar presente.

Y aunque Gutiérrez califica el conflicto actual de "absurdo" e "infantil", muestra mayor comprensión hacia el cantante que hacia Ortiz (baterista), Nano Concha (bajista) y Jorge González (tecladista). "A ellos se les ha olvidado que se retiraron, abandonaron al grupo cuando estaba en el suelo", dice sobre estos últimos, de quienes además cree que "les ganó un poquito la ambición".

Ese mismo factor es el que ve presente tras el anuncio de un nuevo grupo por parte de Ortiz, Concha y González. "He visto que quieren hacer un disco, con un nuevo estilo, pero buscan un cantante que también estuvo con nosotros (Óscar Antonio Sein). Si la idea es cambiar, ¿por qué buscan el pasado? Para mí la idea básica de ellos es confundir, y presentarse como Los Ángeles Negros".

Según él, esa situación ya la ha vivido con el propio baterista: "Luis Ortiz registró a 'Los Ángeles de Chile' en Estados Unidos (...). Eso es desmerecer un nombre, trabajar en la clandestinidad. Si existe un nombre, si fue parte de esta historia, para qué seguir insistiendo por fuera".

Por lo mismo, no cree que una nueva reunión entre sus cuatro ex compañeros termine bien ("siento venir la misma tormenta"), ni menos que él pueda sumarse a esa iniciativa, que ha sido puesta nuevamente sobre la mesa. "¿Yo sumarme a lo que está fuera de lo que se ha hecho? Más bien ellos deberían sumarse a lo mío. Yo estoy trabajando tranquilo, sin pleitos, sin bochornos ante el público de que actúo o no actúo, esos juegos que me parecen infantiles. Nunca digo nunca, pero lo siento difícil, siento que los abismos los están agrandando cada vez más. Las ambiciones de ellos son económicas, no artísticas, y eso es lo que me duele".