El ídolo romántico se mostró más que feliz con su Gaviota de Plata. Hasta la ''compartió''.
Tomás FernándezVIÑA DEL MAR.- "Lo importante es dar un buen show", dice Marco Antonio Solís con sus trofeos viñamarinos al frente. Tras la Gaviota de Oro entregada anoche a Aventura, quedó flotando en el aire la idea de que cuatro trofeos es la cota máxima a alcanzar, y que en determinadas ocasiones no llegar a ella puede ser sinónimo de no haber cumplido la tarea.
Pero el mexicano asegura que eso, para él, no tiene aquella importancia, y que sus tres trofeos son más que una buena cosecha.
En conferencia de prensa posterior a la presentación, el cantautor romántico cuenta que algo escuchaba tras la entrega de la Gaviota, pero nunca supo bien qué. "No entiendo bien la dinámica, no escuchaba, los micrófonos de Rafael y Eva, no escuchaba bien. Yo traía los míos de monitor. Pero yo estoy feliz con el cariño del público, con esa alegría", dice.
Sobre sus intenciones de "compartir" la Gaviota con quienes no la han recibido, expresadas sobre el escenario, el mexicano expresó que "la comparto porque mucha gente no tiene la oportunidad de recibirla. Los artistas somos una familia, y siempre comparto los premios con la gente que no tiene la posibilidad de recibirlos, es también una forma de incentivarlos".
Más allá de su paso por el Festival, el intérprete de "Si no te hubieras ido" —quien declaró su admiración por "Los Ángeles Negros, un grupazo chileno"— adelantó algunos de sus planes para el futuro, entre los que se incluye grabar un álbum de boleros.
"Estoy escribiendo temas inéditos, y me encantaría hacerlos con una sinfónica", contó, revelando una idea que, de concretarse, seguro dará que hablar.