SANTIAGO.- El Presidente Ricardo Lagos lanzó una dura crítica al polémico viaje del abanderado de la Alianza por Chile, Joaquín Lavín, a Haití al afirmar que la política exterior de nuestro país deber ser seria y no puede verse ensuciada con temas de política contingente.
Tras asistir a la inauguración de la planta Pargua de Skretting-Nutreco en la Décima Región, el Primer Mandatario hizo hincapié en que las imagen externa de Chile "debe ser precedida por políticas de seriedad y de coherencia en lo que hacemos, porque es la única forma de ser respetados en el mundo".
Enfatizó que la política exterior de nuestro país tiene una larga tradición al servicio del país y no de elementos subalternos, que -recalcó- no son todavía materia de debate.
En ese sentido, expresó que las decisiones en materia internacional no se pueden adoptar pensando cuántos puntos se ganan en una encuesta. "Y por eso lo que he visto en estos días no me gusta, no me gustan las definiciones de política menor para definiciones que son muy importantes desde el punto de vista del país, y menos me gusta cuando hay situaciones en que son nuestras Fuerzas Armadas las que están como expresión de lo que es Chile sirviendo al servicio de un mandato de las Naciones Unidas, del Consejo de Seguridad. Y Chile como miembro del Consejo asume su responsabilidad y envió a las tropas a participar por mandato y petición de Naciones Unidas", afirmó.
En un viaje que sacó ronchas al Gobierno, el alcalde de Santiago se encuentra de visita en Haití, país al que viajó acompañado de la modelo Marlen Olivari. El edil llevó 700 kilos de ayuda humanitaria a la nación caribeña.
La molestia del Ejecutivo se debe a que la gira deja en mal pie a la ministra de Defensa, Michelle Bachelet, quien había anunciado que viajaría, como lo hizo su par de Francia, Michele Alliot-Marie, quien ya se encuentra en Puerto Príncipe.
El ministro Secretario General de Gobierno, Francisco Vidal, relacionó la iniciativa del edil con una acción propia de la campaña electoral, lo que fue desestimado por el propio Lavín, quien subrayó que el Gobierno siempre busca atacarlo señalando que sus iniciativas tienen un cariz político.
Lo que más complica a La Moneda es que no puede oponerse a un viaje a la nación caribeña cuando ha planteado que la ayuda de Haití es un tema de Estado.