SANTIAGO.- Una mala operación practicada a una perra de raza Dogo de Burdeos y la posterior denuncia de su dueño, permitió a los efectivos de la Brigada de Investigación de Delitos contra el Medioambiente y el Patrimonio Cultural (Bidema), detener a hombre de 25 años, acusado de ejercer la profesión de veterinario de forma ilegal, en una clínica de este tipo en la zona norte de la capital.
Se trata de Eduardo Valenzuela Esquivel, quien trabajó por cerca de un año en la clínica veterinaria "Gatper", ubicada en la calle Barón de Juras Reales, en la comuna de Conchalí, lugar en el que operó al animal a fines de septiembre pasado.
Según informó a Emol el dueño del animal, Daniel Concha, la perra fue llevada hasta un local de la misma empresa en la comuna de Ñuñoa, siendo derivada a la clínica en Conchalí, donde la operaron, por lo que canceló 60 mil pesos.
"Me la trajo el mismo día, pero no me dio indicaciones de cómo debía cuidarla. Al tercer día de la operación, se le abrieron los puntos y lo empecé a llamar para solicitarle ayuda, pero nunca apareció", aseguró Concha.
Ante esa situación, el propietario llevó su animal a una segunda clínica, donde le informaron que la intervención realizada por Valenzuela había sido errónea, lo que finalmente provocó la muerte del animal.
A raíz de ello puso una denuncia en la PDI, lo que motivó una investigación por parte de los efectivos de la Bidema, durante la cual se determinó que éste había presentado un certificado de título falso a los dueños de la clínica y que había estudiado sólo tres años de la carrera en una universidad privada, según informó esta mañana el subprefecto Richard Oliva, jefe de la unidad policial.
Finalmente, Valenzuela fue arrestado por los detectives en la tarde de ayer, mientras atendía a un animal, en la comuna de Pedro Aguirre Cerda.
Oliva agregó que se investigará si hay más afectados y por cuánto tiempo ha ejercido la profesión en forma ilegal.
Él será formalizado por los delitos de falsificación de instrumento público, maltrato animal y ejercicio ilegal de la profesión, en el Centro de Justicia de Santiago.
