Suprema evita pronunciarse sobre impasse con el Gobierno pero admite tensión

SANTIAGO.- Expectación existía este viernes en la Corte Suprema a la espera de la reacción del pleno a la reciente polémica entre el ministro del Interior, Andrés Chadwick, y el presidente (s) del máximo tribunal, Milton Juica, luego de las críticas surgidas por la detención en España de dos de los imputados en el caso bombas, que fueron absueltos por la justicia chilena.

Sin embargo, el tema no fue abordado por ninguno de los ministros durante la habitual reunión de los viernes, según indicó el juez Pedro Pierry al término de la instancia.

Pese a ello, el ministro Nibaldo Segura, quien presidió la sesión -ante la ausencia de Juica- reconoció una "dificultad en las relaciones" entre ambos poderes del Estado y destacó que "nunca se va a estar de acuerdo con que se hable mal de los jueces, a veces injustamente. No me parece que eso sea correcto".

Lo anterior, aludiendo a los dichos del ministro del Interior contra el juez de garantía Luis Avilés y su dura crítica a la resolución judicial que absolvió a seis imputados del caso bombas.

Sus palabras fueron respondidas por el ministro Juica, quien ayer calificó como "impertinentes e inadecuadas" las críticas del jefe de gabinete hacia el Poder Judicial.

Al respecto, el magistrado Segura evitó sumarse a los dichos del presidente (s) de la Suprema, argumentando que "lo que hable el ministro Juica, es del ministro Juica".

Por último, señaló que "todo asunto que provoca controversia, ideas distintas de proceder o actuar de un poder por otro, obviamente que dificulta las relaciones. Y cuando se dificultan las relaciones y no hay concordancia, no se sabe en qué momento pueda llegar la solución".