Hasta pedazos de madera se lanzaban.
El Mercurio
SANTIAGO.- Fue lo que más tensión generó en la amarga jornada que vivió anoche Colo Colo tras quedar eliminado en la Copa Libertadores.
Hasta el minuto 80, todo era fiesta en las tribunas del estadio Monumental. El elenco de Pablo Guede ganaba 1-0 a Botafogo y se estaba quedando con el paso a la tercera fase del certamen continental.
Pero todo cambió radicalmente cuando el delantero Rodrigo Pimpao convirtió el tanto del empate. Los festejos de la barra visitante molestaron a un importante grupo de hinchas albos ubicados en el sector norte del recinto y se desató la violencia.
Una verdadera guerra de proyectiles comenzó a gestarse en dicha zona. Los pedazos de madera ubicados para separar a los forofos fueron retirados y lanzados por los colocolinos a sus pares brasileños.
Iban y venían, por lo que el árbitro argentino Patricio Loustau se vio obligado a detener el compromiso, generando la molestia de los jugadores locales.
Pero la decisión adoptada por el réferi trasandino parecía acertada. Los incidentes lejos de cesar se multiplicaban, ante la inoperancia de los guardias de seguridad que se vieron sobrepasados.
Finalmente solo el aviso por el altoparlante ayudó a mitigar la violencia, que a esa altura ya amenazaba con suspender el pleito, ya que el veedor de Conmebol se acercó muchas veces a Loustau para apurar alguna determinación.
Mira aquí los tensos minutos que se vivieron en el Monumental.
