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El mesurado camarín de la U que pese a quedar a un paso de su título 18 no se confía de cara al duelo ante San Luis

Tras el categórico 3-0 sobre O'Higgins en Rancagua y la igualdad 1-1 de Colo Colo frente a Deportes Antofagasta, el cuadro azul quedó con la primera opción de coronarse campeón del Torneo de Clausura.

15 de Mayo de 2017 | 12:12 | Por Javier Ugarte Marisio, Emol
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Pese al gran triunfo que logró la U sobre O'Higgins en Rancagua, el camarín y el cuerpo técnico azul llamaron a la cautela.

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SANTIAGO.- Pitazo final del árbitro Carlo Ulloa, quien reemplazó al lesionado Roberto Tobar, en el duelo entre O'Higgns y la Universidad de Chile en Rancagua.

Los azules ganaban categóricamente por 3-0, mientras en el estadio Monumental aún Colo Colo igualaba 1-1 frente a Deportes Antofagasta.

16:57 horas y termina el duelo en Pedrero. Los albos solo empataban contra el conjunto nortino, resultado que provocaba los abrazos de los jugadores azules en el campo de El Teniente, mientras que los cerca de dos mil hinchas universitarios cantaban a viva voz: "¡Vamos, vamos leones que el domingo la vuelta vamos a dar...".

Claramente la alegría era total entre los forofos que llegaron al recinto de la Sexta Región, sin embargo en el camarín del conjunto laico la reacción fue mesurada.

Si bien en la cancha los rostros de los dirigidos por el técnico Ángel Guillermo Hoyos evidenciaban mucha felicidad, luego de quedar punteros absolutos de la tabla con 27 unidades, una más que el Cacique, en el vestuario todo fue tranquilidad.

El DT "felicitó uno por a uno a los jugadores, les dijo que hicieron un tremendo esfuerzo y que realizaron un notable partido, pero que aún no se había ganado nada...", señaló a Emol un integrante del staff técnico del argentino.

Aunque hubo gritos de desahogo en el vestuario, la mesura era lo que primaba al interior del plantel, considerando que el sábado aún les queda doblegar a un duro rival como San Luis, cuadro que viene de vencer por 3-2 a Unión Española en Quillota.

Luego de más de 30 minutos, los jugadores de la U comenzaron a transitar por la zona mixta sin entregar declaraciones, salvo el arquero y capitán Johnny Herrera. "Cuando falta tan poco para conseguir algo las sensaciones son demasiadas. Estamos más tranquilos que nunca. Se consiguió un paso, pero falta lo más importante y estamos con los pies sobre la tierra. Dios quiera que podamos ganar el título".

Y sobre lo mismo, agregó: "Todavía no hemos ganado nada, viene una semana muy importante para la institución y queremos enfrentarlo con un profesionalismo tremendo".

Por ahora, existe plena cautela en el equipo laico, sin embargo tienen claro que solo depende de ellos sumar su copa 18 para las vitrinas del CDA. Una victoria frente a los quillotanos los convertirá en los nuevos campeones del fútbol chileno.