SANTIAGO.- Ya está. Finalmente los tres años de espera acabaron y Universidad de Chile conquistó su estrella número 18 tras ganar el título del Torneo de Clausura.
Los azules dieron vida a una campaña que fue de menos a más y que terminó con la consagración de un equipo liderado por Ángel Guillermo Hoyos.
Aquí revisamos los hitos que marcaron el camino del cuadro laico a su nueva corona.
La llegada de Hoyos
Terminaba el 2016 y la U confirmaba la llegada de Ángel Guillermo Hoyos tras la salida de la dupla técnica Castañeda-Musrri. El técnico argentino era el elegido por Azul Azul para levantar a un equipo muy golpeado y que no sabía de ganar un título desde 2014.
Hoyos apostaba por el proyecto del elenco chileno y sin pensarlo dos veces dejaba el mando de la selección de Bolivia, que a esa altura ya estaba sin opciones de ir al Mundial de Rusia 2018.
El regreso de Pizarro
Lucas Ontivero y David Pizarro, esos fueron los refuerzos laicos para este Clausura –sin contar los regresos de Benegas y Espinoza. El primero llegaba desde Estados Unidos, el segundo arribaba sin jugar hace seis meses.
La apuesta de fichar al "Fantasista" fue de Hoyos, quien al ver cómo entrenaba el volante no dudó en pedir su fichaje de la dirigencia. Y no se equivocó. Si bien el mediocampista no gozó de titularidad, sí fue ingreso obligado en cada partido y a la larga se transformó en un hombre clave en el camino al título.
Un inicio lleno de dudas y fantasmas
2 derrotas, 1 empate y apenas 1 triunfo fue el saldo de los primeros cuatro partidos del DT argentino al mando de la U. Los azules mostraron los mismos errores del pasado y arrancaron el Clausura con incertidumbre e impotencia.
Para muchos hinchas la elección de Hoyos había sido incorrecta y pese a que el torneo recién empezaba, para un gran número creía que los fantasmas continuaban y que otra vez tendrían un campeonato para el olvido. Las críticas eran duras contra el DT y varios jugadores.
La partida de la "Gata" Fernández
Un sólo triunfo en 4 partidos ponía en tela de juicio la llegada de Hoyos y la continuidad de algunos futbolistas, entre ellos Gastón Fernández. El delantero argentino era uno de los principales apuntados por el bajo rendimiento de los azules.
Cansado de las críticas, el atacante trasandino decidió aceptar la millonaria oferta que le llegó desde Brasil y sin pensarlo dos veces partió a Gremio dejando a los universitarios con el torneo en andas. Coincidencia o no, su partida tuvo de la mano el alza significativa del equipo laico.
El despegue y una larga racha
La victoria de 3-1 sobre Palestino fue el punto de inflexión. Después de un inicio lleno de dudas, el triunfo ante los árabes le devolvía la sonrisa a los fanáticos azules y le daba un respiro a un camarín que nuevamente se derrumbaba.
Aquella celebración frente al equipo tetracolor fue la primera de muchas. Luego la U derrotó a Audax (3-0) y Unión Española (2-1) encadenando un total de 8 partidos sin perder, donde 5 de ellos fueron victorias.
El Superclásico clave
El gran vuelo que agarró el conjunto universitario fue clave para llegar a enfrentar al archirrival el 08 de abril. Esa racha le permitió llegar a enfrentar a Colo Colo, quien venía de perder el liderato a manos de Iquique, con la opción de igualarlo en la tabla y de comenzar a soñar con el título.
Si bien el partido terminó 2-2 en el Nacional, ese resultado le permitió a los pupilos de Hoyos seguir en carrera por la corona al impedir que el Cacique, firme candidato a la corona a esa altura, se escapara en la tabla.
Las expulsiones, el punto negro de la campaña
Mientras en lo futbolístico las cosas marchaban bien, había un problema que complicaba al elenco de Hoyos: Las expulsiones. El DT argentino debía lidiar con las tarjetas rojas a jugadores fundamentales en su esquema como Gonzalo jara (2 veces), Gonzalo Espinoza (2) y Gustavo Lorenzetti (1).
Un clásico que casi apaga el sueño
La U necesitaba ganarle a la UC para no perder la cima que recién había alcanzado junto a Colo Colo. Su buen nivel le daba el favoritismo en San Carlos, sin embargo, los azules se apagaron y terminaron cayendo 3-1 en el clásico universitario y de paso perdiendo el largo invicto de 8 encuentros.
Afortunadamente para los laicos, esa misma fecha el Cacique e Iquique empataron sus encuentros y no lograron escaparse en lo más alto. La derrota era dura, pero el sueño de campeonar aún estaba vivo.
El "regalo" de Colo Colo y el gran paso a la gloria
Penúltima fecha del Clausura. Albos y azules jugaban en simultáneo. El Cacique llegaba con un punto de ventaja en la cima e incluso con la opción de ser campeón si es que los dirigidos de Hoyos perdían con O’Higgins.
Parecía que todo seguía tal cual hasta la última fecha, pues ambos equipos ganaban sus encuentros, sin embargo, un gol en la agonía de Antofagasta le arrebató la victoria y el liderato a Colo Colo dejando a la U con la primera y gran chance de depender de sí misma para levantar la copa en la jornada final.
La anhelada estrella 18
Tuvieron que pasar tres años de pena y sufrimiento para que la U volviera a ser campeón. Los azules confirmaron la ventaja con que llegaban a la última fecha y finalmente se consagraron ante San Luis como los nuevos monarcas del fútbol chileno. El título 18 al fin llegaba a las vitrinas laicas.
