La "Roja" no sólo brilla dentro del campo.
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KAZÁN.- Chile ya está en la final de la Copa Confederaciones. La "Roja" está a un paso de otra vez gritar campeón.
Y gran parte del trabajo pasa por sus jugadores, unos que también han deleitado fuera de la cancha en este campeonato con grandes y destacados gestos.
Arturo Vidal ha sido por lejos el jugador que más se ha llevado los aplausos. Es que la cantidad de gestos que ha tenido en este torneo lo hacen aún más grande.
Por ejemplo, en el duelo ante Portugal el volante del Bayern se acercó a la tribuna y luego de saludar a los hinchas, se sacó su camiseta y la tiró hacia el público.
La locura era total, pues todos querían atrapar la camiseta que el "Rey" había ocupado en el intenso y emocionante partido frente al campeón del mundo.
En otra muestra de su grandeza, ese mismo día después del triunfo, Vidal salió hacia la cancha del Kazán Arena y se tomó una selfie junto a todos los colaboradores del certamen que han trabajado en la ciudad rusa.
A todo esto se suma la gran cantidad de veces que el mediocampista ha dedicado minutos a sacarse fotos y firmar autógrafos afuera de los hoteles en que ha estado la selección en este certamen.
Pero no sólo Vidal ha sorprendido. Por ejemplo, Alexis Sánchez lo hizo regalándole a un periodista la camiseta con la que se convirtió en goleador histórico de la "Roja".
Luego de hablar tras ser elegido el jugador del partido ante Alemania, la figura del Arsenal le regaló su prensa a Rodrigo Herrera. El profesional de Mega no lo podía creer. "Quedé helado, ni nos conocíamos", contaba a Emol.
Además, el mismo Alexis le obsequió su camiseta a Tim Cahill el día en que el histórico delantero australiano cumplió 100 partidos con su selección.
Marcelo Díaz se suma a la lista. En una de las tardes libre de la "Roja" en Rusia, el volante salió a conocer la Plaza Roja de Moscú y en su recorrido se encontró con hinchas chilenos.
Solidario como siempre, el "motor" de la selección accedió a fotografiarse y firmar autógrafos sin problemas haciendo felices a varios fanáticos que también paseaban por ese histórico lugar.
Parecen gestos simples, pero con el hermetismo que existe en la selección muchas veces es difícil que los jugadores lleguen a la gente como ha ocurrido en Rusia.
