El atacante se vistió de villano ante su ex escuadra.
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SANTIAGO.- Durante la semana, Patricio Rubio había anticipado que si le marcaba un gol a Universidad de Chile en el duelo que Everton debía sostener ante los laicos por la séptima fecha del Transición, iba a celebrar.
Finalmente, aquello se concretó a medias. Sí, porque el ex azul fue determinante en el resultado al marcar el tanto que selló el empate 2-2 ante el elenco de Ángel Guillermo Hoyos en un intenso compromiso disputado en el Estadio Nacional.
Pero Rubio festejó a medias e incluso pidiendo perdón ante la hinchada universitaria, que nuevamente ve como su equipo deja escapar puntos y se enreda en la lucha por el título, esa que hoy la ponía en un escenario favorable tras la igualdad del puntero Unión.
El encuentro disputado en Ñuñoa ante unos 35 mil espectadores fue intenso de principio a fin. En el global, fue la visita dirigida por Pablo "Vitamina" Sánchez la que dominó más y mereció mejor suerte.
Los ruleteros, quienes de ganar igualaban a los hispanos en la cima con 17 unidades, comenzaron de mejor forma y pusieron a trabajar desde los primeros minutos al portero Johnny Herrera.
Pero fue el dueño de casa que abrió la cuenta, cuando Mauricio Pinilla a los 8 minutos y ante la pasividad del zaguero Francisco Venegas, giró de mediavuelta y venció al portero Eduardo Lobos.
Si el resultado era injusto, lo era aún más cuando el propio Pinilla cambió por gol una falta penal y estructuró el 2-0 en el Nacional. Era mucho castigo para Everton, que pese a los golpes asestados, no cedió.
Así llegó el descuento de Oscar Salinas a los 32', quien definió de manera sutil ante el achique de Herra para colocar el descuento con el que se fueron al descanso. En el complemento, todo cambió con el ingreso de David Pizarro en los azules. El elenco de Hoyos mejoró y estuvo cerca del tercero, pero careció de la contundencia exhibida en el primer período.
En ese ir, el anfitrión dejó espacios y cada vez que Everton generaba peligro, la defensa laica mostraba falencias. Así llegó la paridad final: Un centro por izquierda terminó con una mala salida de Herrera y una descordinación con un compañero, que le dejó la pelota servida a Rubio para firmar el empate definitivo a los 74'.
En el final, tanto la U como el conjunto viñamarino pudieron quedarse con la victoria, pero Osorio no vio un supuesto penal sobre Juan Cuevas y el travesaño le impidió el grito de jolgorio a Pizarro.
Con este resultado, los colegiales sumaron 11 puntos y se estancan en el quinto casillero, mientras que los oro y cielo alcanzan los 15 positivos y mastican la rabia de no trepar a lo más alto de la tabla.
