SANTIAGO.- Las selecciones menores iraquíes han estado siempre en el foco de la polémica por incluir futbolistas con edad adulterada. Las sospechas se instalaron a fines de los años 70, cuando los "Leones de Mesopotamia" jugaron el primer Mundial Juvenil, Túnez 1977, después de haber eliminado en el certamen asiático a Irán, adversario político y deportivo. Los persas dieron también un gran golpe: clasificaron al Mundial de Argentina 1978.
El ardid se habría extendido hasta hoy, con la Sub 17 que ganó el torneo continental por primera vez y obtuvo boletos para el Mundial de India, donde venció 3 a 0 a Chile.
La gran estrella del equipo, el delantero Mohammed Dawood, constituye un caso, según el periodista iraquí Hassanin Mubarak, quien ha denunciado estas prácticas desde hace años.
Según los registros del reportero, el atacante era Sub 19 en la temporada 2014-15, por lo que ahora tendría al menos 21 años.
Hace cuatro años, Chile enfrentó a Irak en el Mundial Sub 20 de Turquía 2013. Los asiáticos ganaron 2 a 1 y terminarían siendo cuartos. De aquel plantel, el arquero Mohammed Hameed y el goleador Mohanad Abdulraheem, entre otros, habrían actuado pasados de edad. El meta estuvo en una Sub 23 en 2005 y ocho años más tarde figuraba con 20. Insólito.
En 2012, cuando la Sub 20 viajaba a un torneo amistoso en Jordania, nueve integrantes de la delegación fueron retenidos por policía internacional acusados de adulterar su pasaporte.
Los ejemplos se multiplican las últimas décadas, con el hijo mayor de Saddam Hussein, Uday, como protagonista. El primogénito del ex gobernante presidió el Comité Olímpico y la Federación de Fútbol. En este último cargo, que detentó en dos etapas (1985-88 y 1990-2003), sistematizó la trampa y castigó a quienes le desobedecieran, según Mubarak.
La FIFA puso ojo en el tema por el caso del arquero Emad Hashim, quien fue inscrito con edades distintas en dos torneos. El meta jugó el Mundial Sub 20 de 1989 en el que Irak terminó primero en su grupo, sorprendiendo a España, Argentina y Noruega, antes de caer ante EE.UU. en cuartos de final.
En el Mundial Sub 20 de 2001, y después de vencer a Canadá, hubo un reclamo porque varios futbolistas estaban inscritos con la misma fecha de nacimiento: 1 de julio. El año anterior, en el clasificatorio, los "Leones" fueron campeones teniendo en sus filas a Basim Abdul-Hassan, de 26 años.
Otro caso emblemático es el del volante Muthana Khalid, quien decía haber nacido en 1989, pese a que previamente había participado con un pasaporte de 1986.
Para el Sub 19 de Asia de 2014, según el sitio Iraqsports, solo 4 de los 22 futbolistas tenían edad real para jugar. Incluso en el plantel figuraba Rawan Al-Nahi, quien fue seleccionado adulto en 2010.
En 2015, la Sub 19 incluyó a un portero de 29 años contra Irán y en 2016 sus goleadores, Kareem Ali y Alaa Abbas Abdulnabi, tenían 25 y 23 años, respectivamente. Y esta temporada, la Sub 23 contó con el zaguero Mohanad Arzeij, de 32 años.
La trampa genera un efecto dominó sobre la selección mayor: los futbolistas debutan en el combinado adulto cuando en realidad tienen cerca de 27 años biológicos y no han competido en el alto nivel. Y cuando ya registran oficialmente 30 años, en realidad ya cuentan con 33 o 34 y es muy tarde para proezas.
Mira la publicación de Mubarak, justo después del 3-0 de Irak sobre Chile.
