Santiago Wanderers vivió un drama al descender a la Primera B.
Photosport
SANTIAGO.- Ya está sentenciado. Santiago Wanderers descendió a la Primera B del fútbol chileno, luego de caer en una infartante definición por penales ante Unión La Calera.
Si bien en la ida el Decano venció por la cuenta mínima, en la revancha el gol en el minuto 94 de Rafael Viotti permitió a los "cementeros" disputar la tanda desde los doce pasos, la que a la postre les dio el ascenso a la división de honor del balompié nacional.
Tras el partido, el drama se instaló en Valparaíso. Los jugadores del conjunto porteño lloraban en el centro del campo, mientras el técnico Nicolás Córdova intentaba consolarlos.
Pero nada tranquilizaba a un quebrado plantel caturro, que pese haber ganado la Copa Chile en la final frente a la U, el pasado 11 de noviembre, y obtener un cupo en la Fase 2 de la Copa Libertadores, finalmente volvieron a descender después de ocho años.
Pero más allá de la enorme tristeza que se vivió en el estadio Elías Figueroa, el dispar año que tuvo Santiago Wanderers comenzó a gestarse desde a comienzos de esta temporada, considerando el pésimo Torneo de Clausura 2016-2017 que realizó el cuadro de la Quinta Región.
En dicho certamen, los verdes finalizaron en el penúltimo lugar de la tabla de posiciones, luego de sumar tres partidos ganados, cuatro empates y ocho derrotas, registro que los dejó en el último lugar de la Tabla Acumulada al inicio del Torneo de Transición.
Así, en el campeonato que coronó a Colo Colo, el Decano volvió a tener una pésima campaña. Los dirigidos por Córdova finalizaron en el casillero 13, tras ganar sólo dos compromisos, igualar nueve y perder cuatro.
Con esta estadística y luego de continuar en el fondo de la Acumulada, con un 1,02 coeficiente de rendimiento, los porteños terminaron disputando la Promoción ante Unión La Calera.
Por ahora, el dolor sigue en el puerto, aunque el próximo 30 de enero tendrán un nuevo desafío: su debut en la Copa Libertadores frente a Melgar de Perú.
