Fue el "ángel" de Casale.
Martín Gutiérrez, Emol
TUPIZA.- Ignacio Casale es sincero. Su gran rendimiento en el Rally Dakar, en el cual es el firme líder en los cuadriciclos, lo tiene en un estado de completa tranquilidad y concentración.
"Ganar el Dakar depende de mí mismo y de que no cometa ningún error", aseguró en su arribo al atribulado campamento de Tupiza, que fue afectado por las inundaciones y el barro.
La una hora y 40 minutos que tiene sobre su escolta, el argentino Jeremías González Ferioli, mantiene confiado al gran crédito nacional en los quads. Pero también hace aflorar su humildad y agradecimiento a un piloto que lo salvó de un potencial abandono.
Ocurrió en la etapa maratón entre La Paz y Uyuni. "Quedé enterrado con la moto y al menos tres veces intenté sacarla, pero no podía y en un momento pensé que me quedaba ahí. Pero un piloto de motos me ayudó y la verdad es que le agradezco mucho", precisó el santiaguino.
¿Quién fue? Producto del cansancio y el esfuerzo físico, el "Perro" no tiene claridad, aunque cree que fue el número 43: El checo David Pabizka.
Al ser consultado por Emol, el europeo confirmó que fue él de la aparición milagrosa. "Estaba muy cansado y atascado en medio de las dunas y no dudé en ayudarlo", expresó.
De esta forma, Pabizka se convirtió en un verdadero "ángel" para el "Perro", quien sigue ladrando con firmeza gracias a la intervención de este solidario piloto checo...