Ramón Fernández falló un penal, pero anotó un golazo de tiro libre.
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SANTIAGO.- O'Higgins tuvo que luchar para rescatar un empate en condición de local ante un aguerrido cuadro de Curicó Unido.
Y uno que pasó de la pena a la gloria en el cuadro local fue Ramón Fernández.
El volante celeste desperdició un lanzamiento penal en el primer tiempo, que hubiera sido la apertura de la cuenta, pero a poco del final anotó un golazo de tiro libre que significó el 2-2 definitivo ante los "torteros".
Y el fallo desde los doce pasos fue temprano. Una mano en el área curicana terminó con el cobro del juez. Fernández se paró en el punto penal, pero su disparo fue contenido por el meta Jorge Deschamps.
Así las cosas, el marcador se mantuvo igualado hasta el complemento, cuando a los 60' Nicolás Gauna aprovechó una mala salida de Miguel Pinto para abrir la cuenta en El Teniente.
Ya 20 minutos más tarde el juez volvió a cobrar un penal para el local, ahora generando los reclamos generalizados del plantel y cuerpo técnico de Curicó. Pero en esta oportunidad fue Pablo Calandria quien remató y no falló para poner el empate transitorio.
Aunque Curicó tenía algo más que decir. A los 85' Mauro Quiroga aprovechó un gran pase de Ricardo Blanco para poner la ventaja que a esa altura parecía definitiva. Aunque Ramón Fernández dijo lo contrario.
Se jugaba el tercer minuto de tiempo adicional, de un total de cinco, y el volante ejecutó a la perfección un tiro libre que decretó el 2-2 definitivo en el marcador. Resultado que deja a O'Higgins aún en la medianía de la tabla y a Curicó en la zona baja de la clasificación.
