Vidal viene de jugar un partidazo contra el Atlético de Madrid.
AFP
El Barcelona vivió una tormentosa semana. Tras la increíble eliminación en semis de la Supercopa de España frente al Atlético, la directiva decidió despedir a Ernesto Valverde e inmediatamente anunció la llegada de Quique Setién. No hay tiempos para lamentos ni para adaptación. Los catalanes pelean palmo a palmo la liga con el Real Madrid y este domingo reciben al Granada.
Uno de los temas que ha rondado hace tiempo en las oficinas del Barça es la continuidad de Arturo Vidal. Se sabe que el Inter de Milan lo quiere y que el chileno no está conforme yendo al banco de suplentes. Con el arribo de Setién, además, se instaló la duda sobre si el "Rey" encajaría en su sistema. Pese a que tiene dos bajas confirmadas (Arthur y Frenkie de Jong) para el duelo con los nazaríes, el DT no confirmó la titularidad del ex Juventus y Bayern Munich.
"Les he dicho, cuando hemos jugado al final un rato, que las alineaciones de los dos equipos no tienen nada que ver con la que va a ser mañana. Todos tienen el mismo rol, quiero que estén conectados. Hay jugadores con una cierta jerarquía que les ponen en un escalón superior. Hay que ganarse el puesto cada día. El que no sea titular, tendrá que ganarse el protagonismo. No me gusta hablar de jugadores concretos", comentó en rueda de prensa.
La principal crítica que se la ha hecho a Vidal desde que llegó a Barcelona es su fútbol anárquico. Para los más puristas, no calza con el juego de posesión que ha implantado el cuadro blaugrana desde Johan Cruyff en adelante. Al ser consultado respecto a este tema, Setién fue claro.
"Sin ceñirme a ningún jugador, le damos mucha importancia al orden. No solo a Arturo, sino a otros jugadores que tienden a desordenarse. Incidiremos mucho en esto. De la misma manera que tendrás orden para atacar, tendrás orden para defender. Esto lo acabaremos consiguiendo", afirmó.
Con Valverde, el elenco culé conquistó dos ligas y sumó varios puntos. Sin embargo, el juego exhibido nunca fue del gusto de la grada. En varios partidos, parecía que solo Lionel Messi podía rescatar al equipo. Setién tiene claro que no basta con ganar.
"Siempre prefiero ganar. Yo lo que quiero es ganar. Si gano jugando mal, no me iré contento a casa. Jamás les diré a los futbolistas que con el resultado me vale. Todos somos capaces de entender que uno si juega bien, tiene más posibilidades de ganar. Siempre procuraré que mi equipo juegue bien", expresó.
