Italia ha sido uno de los países más afectados con la propagación del coronavirus con más de 12.000 personas fallecidas a raíz de los contagios.
Por lo mismo, desde China un símbolo de la selección italiana escribió una emotiva carta para darle fuerzas a un pueblo completamente golpeado con el Covid-19.
Se trata de Fabio Cannavaro, defensa campeón del mundo con la "Azzurra" en Alemania 2006 y que ganó el Balón de Oro el mismo año.
Desde China, país en el que entrena al Guangzhou Evergrande, el ex zaguero de 46 años le envió fuerzas a su patria y aseguró que se impondrán a este duro momento.
Lee aquí la carta del símbolo italiano
"Lo que le está sucediendo a nuestro país ahora me está llenando de ansiedad y dolor. No puedo describir lo horrible que es ver a Italia sufrir así, ver tantas vidas perdidas cada día. Mi corazón está con todas las personas que han sido afectadas y especialmente con aquellas que han perdido a alguien con quien estaban cerca. También quiero saludar a los médicos que trabajan arduamente para salvar tantas vidas como sea posible. Ustedes son los verdaderos héroes que nuestro país necesita ahora"
"Desafortunadamente, la realidad es que ninguno de nosotros es un súper hombre. Ninguno de nosotros es inmune a este virus. Sin embargo, cuando estalló la epidemia en China, sentí que los italianos pensábamos que estaríamos bien. Como si todos estuviéramos pensando: bueno, al menos no me afectará. Ciertamente subestimé eso. Al principio pensé que era solo una gripe. Qué equivocados estábamos".
"Sabemos que Italia es un país increíble. Tenemos playas impresionantes y un paisaje pintoresco. Tenemos un clima que nos permite pasar mucho tiempo al aire libre. Tenemos moda, tenemos comida. Pero la vida en Italia es tan buena que a veces tendemos a descansar en nuestros laureles. A veces nos ocupamos de nuestras propias cosas en lugar de pensar en el bien común. Y cuando hacemos eso, estamos desperdiciando nuestro potencial. Afortunadamente, sin embargo, también hay momentos en los que realmente decidimos mostrar nuestro orgullo, y esos momentos tienden a ser cuando las cosas se ponen difíciles, cuando algo importante está en juego".
"He experimentado esto muchas veces, y los mejores ejemplos que me vienen a la mente son cuando Italia juega el Mundial. Quizás esto parezca extraño mencionarlo en un momento en que los deportes parecen más triviales que nunca. Pero como todos sabemos, el fútbol es más que un deporte en Italia. Cuando el equipo nacional juega, todos se sienten parte de él. Y cuando los italianos se unen, lo solemos hacer bien".