Siendo el evento deportivo más golpeado por la crisis sanitaria del coronavirus, los Juegos Olímpicos de Tokio tomaron una medida radical para garantizar su realización durante la pandemia.
La cita olímpica confirmó que se desarrollará sin visitantes extranjeros, decisión que había sido anticipada en las últimas semanas.
"En orden de ofrecer claridad a los poseedores de entradas que viven en el extranjero y permitirles que puedan ajustar sus planes de viaje en este momento,
las partes desde el lado japonés han llegado a la conclusión de que esas personas no podrán entrar en Japón en ese tiempo de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos", anunció la organización a través de un comunicado.
Tanto el Comité Olímpico Internacional (COI) como el Comité Paralímpico Internacional (CPI) aseguraron que "respetan totalmente y aceptan esta conclusión". En tanto, la ministra de Deportes de Japón, Tamayo Marukawa, confirmó la decisión al asegurar que "se decidió abandonar la opción de recibir a visitantes del extranjero".
Ahora se deberá decidir cuantos espectadores locales podrán asistir a cada prueba. Además, se dejó abierta la opción de que personas relacionadas con la logística o las delegaciones puedan entrar al país del sol naciente.
También se inició el proceso de devolución de entradas del evento. Hasta el anuncio, fuera de Japón se habían vendido unas 600 mil entradas para los JJ.OO. y unas 30 mil para los Paralímpicos aproximadamente.
Recordemos que ya hay catorce deportistas chilenos clasificados a Tokio. Estos son Francisca Crovetto (Tiro Skeet), Macarena Pérez (Ciclismo BMX), Martín Vidaurre (Ciclismo Cross Country), María José Mailliard y Karen Roco (Canotaje), Esteban Bustos (Pentathlon Moderno), Kristel Köbrich (Natación), Ignacio Montesinos y Carlos Lobos (Ecuestre), Clemente Seguel (Vela), Simona Castro (Gimnasia Artística), Fernanda Aguirre (Taekwondo) y Yasmani Acosta (Lucha).