Universidad Católica llegaba golpeada al duelo con Nacional de Uruguay por Copa Libertadores. Había perdido sus dos partidos previos y dejando una pálida imagen. Pero esta noche se resarció. En un encuentro duro, y con más de una pelea, le ganó 3-1 a los charrúas en San Carlos de Apoquindo.
Con este resultado, los cruzados quedan en el tercer lugar del Grupo F con tres puntos. A uno de Atlético Nacional de Colombia y a tres de Argentinos Juniors, que juegan este jueves. El "Bolso", en cambio, está en el fondo con solo una unidad.
El cuestionado Gustavo Poyet toma respiro. Las críticas a su trabajo habían sido fuertes y él mismo reconocía que no estaba jugando bien. Hizo cambios. Puso desde el arranque a Edson Puch y dejó en el banco a Luciano Aued para darle entrada a Juan Leiva. Se veía otra intensidad, otra actitud. A los 29' se abrió la cuenta. Mano clara dentro del área de Nacional y Fernando Zampedri no falló desde el punto penal.
Era un buen momento de la UC. Manejaba la pelota e intentaba hacer daño por fuera, aunque le faltaba algo de profundidad. La visita no tenía fluidez y no generaba riesgo, pero consiguió el empate. Leandro Fernández apareció solo en el área y fusiló a Matías Dituro justo antes de ir al descanso.
Los precordilleranos se veían desorientados. Otra vez eran el equipo pálido de encuentros anteriores. Pero Poyet movió el banco y encontró soluciones. Hizo ingresar a Diego Valencia y Clemente Montes.
En la primera que tocó, Valencia puso el segundo a los 60'. Agarró un rebote dentro del área y sacó un tremendo zurdazo para batir a Sergio Rochet. Montes, en tanto, cada vez que agarraba la pelota hacía sufrir al fondo uruguayo. Siempre la pedía por la izquierda y mostraba desparpajo en el uno a uno.
El duelo se fue calentando. Hubo varias peleas. Christian Almeida se fue expulsado a los 83' en el elenco de Montevideo tras caer en la provocación del astuto Zampedri. Luego, Diego Poyet, ayudante e hijo del DT, también vio la roja por cruzarse con Andrés D'Alessandro.
La UC no lo liquidaba. Montes tuvo un remate que se fue afuera por muy poco y luego el palo le negó el gol. Sin embargo, tendría revancha. Marcelino Núñez rompió por el medio y tocó para el extremo, quien definió con un derechazo pegado al poste a los 90+3'.
El tricampeón nacional debe seguir mejorando. Este miércoles obtuvo una victoria que vale más que tres puntos. Suma confianza y le quita tensión al ambiente de cara a lo que viene.