La "Roja" tiene un difícil desafío este jueves. Visita a Argentina por las Clasificatorias rumbo a Qatar.
La "Albiceleste" ha sido un rival históricamente complejo para el seleccionado nacional. Casi imbatible. Solo ha ganado en un partido oficial y en apenas dos ocasiones ha podido rescatar puntos en suelo trasandino por Eliminatorias.
La primera vez fue el 15 de diciembre de 1996. El equipo de Nelson Acosta salió a defenderse con un cerrado 4-4-2. El objetivo era tener bien vigilado a Gabriel Batistuta dentro del área y neutralizar los arranques de Ariel Ortega por las orillas. En ataque se apostaba a balonazos largos y a lo que pudiera hacer Marcelo Salas. Sin embargo, el plan se complicó. Luis Chavarría, que en la fecha anterior había agradecido a Dios por lesionar a Enzo Francescoli, se fue expulsado por una violenta infracción.
Pese a tener uno menos, Chile logró resistir el asedio argentino. A los 50' vino la sorpresa. Marcelo Salas recibió en la izquierda y se lanzó a correr en solitario contra los defensores trasandinos. Cerca del área lo cruzaron fuerte. Tiro libre peligroso.
Fernando Cornejo lo pateó y buscó el palo del arquero. Pablo Cavallero dio un paso en sentido contrario y ya no pudo reaccionar. Golazo. Minutos después, Roberto Ayala se fue a las duchas por un manotazo al "Matador". Eran diez contra diez.
Pero a los 70' Ariel Ortega entró al área y Ronald Fuentes le hizo un innecesario penal. Gabriel Batistuta no falló. Sin tantas ideas, pero con empuje, Argentina pudo ganarlo. El travesaño y un cruce providencial de Pedro Reyes lo impidieron.
La siguiente igualdad se produjo en 2003. Enfrente estaba la Argentina de Marcelo Bielsa, que buscaba mejorar la pálida imagen dejada en el Mundial de Corea y Japón.
El local tomó rápidamente el mando del partido. Se puso en ventaja con goles de Cristian "Kily" González y Pablo Aimar (31' y 35'). El equipo del "Loco" parecía estar una marcha más arriba. Los dirigidos de Juvenal Olmos, en cambio, no reaccionaban, estaban sin chispa. Daba la impresión que podía terminar en goleada.
Pero todo cambió a la vuelta de camarines. Olmos habló fuerte e hizo dos cambios claves: entraron Mauricio Pinilla y Jorge Acuña.
A los 60' Milovan Mirosevic se juntó con Acuña y definió con un potente remate arriba. Fue una inyección de adrenalina y el encuentro se calentó. Acuña se encaró con Aimar y lo tiró al suelo de un empujón.
A los 77' Pinilla armó una gran jugada por el centro y profundizó con Reinaldo Navia. El "Choro" metió un zurdazo que sorprendió al Monumental. Última alegría de la "Roja" en Buenos Aires.
