El pasado 26 de agosto comenzaba la aventura de Nicolás Castillo en el Juventude de Brasil. Ha pasado poco más de un mes y los días no son fáciles para el delantero chileno.
El ex UC arribó al club que milita en el Brasileirao sabiendo que debía lucha por un lugar, pero con la esperanza de ir sumando ritmo después de su salida del América.
Las ganas del atacante de volver a jugar se sustentaban en que ya había visto acción en algunos amistosos en México, tras un año y medio sin pisar una cancha, y que poco a poco seguía su puesta a punto.
La ilusión se acrecentaba cuando debutaba el 11 de septiembre ante el Cuiabá, aunque fuera apenas un rato. Sin embargo, después de los 2 minutos que jugó ese día, Castillo no ha vuelto a aparecer.
Ese saldo es lo único que ha jugado desde que llegó al Juventude, que tras el estreno del oriundo de Renca ha disputados otros dos encuentros: En el primero, el chileno no fue convocado y en el siguiente no salió de la banca.
En total, el ex UC ha sido citado para cuatro duelos y sólo en uno jugó esos 2 minutos que lleva hasta ahora en el conjunto brasileño. Ante este escenario, su entrenador fue bastante claro.
"Nico viene trabajando y evolucionando. Sabemos que no es fácil estar casi dos años sin jugar. Hay muchas diferencias en la velocidad del juego y yo tengo que ser coherente con el grupo y el vestuario", expresó Marquinhos Santos.
Incluso, el técnico fue tajante: "Los jugadores que estén en mejor condición van a jugar. No puedo sacar un jugador para agradar a A o B, o para hacer marketing".
El DT dio sus argumentos para llevar con calma la incorporación de Castillo: "Es un gran profesional, comprometido y alegre. Pero tenemos otros jugadores que están en un mejor momento en la parte física".
"En el momento en que yo crea que Nicolás ha alcanzado el nivel, tendrá la oportunidad. Pero es hora de esperar", cerró.
