Ronnie Fernández anotó el primero del partido.
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Santiago Wanderers parecía condenado al descenso. Su situación sigue siendo crítica, pero ha cambiado su imagen y da pelea. Lleva cuatro triunfos seguidos. Este miércoles le ganó 2-1 a la U en Playa Ancha.
Wanderers está en el fondo con 14 puntos, pero ha logrado reducir a seis la distancia con el penúltimo Curicó y a siete con Melipilla.
La U, que venía de perder el Superclásico, queda en el sexto lugar con 33 puntos y el líder Colo Colo le podría sacar 13 de ventaja si vence a Ñublense.
El cuadro caturro arrancó mucho mejor. Al minuto casi abre la cuenta, pero Fernando De Paul lo evitó. El local era intenso, agresivo en la marca, imponía su ritmo. El gol no tardaría en llegar. Se cobró penal por una clara mano de Ramón Arias y Ronnie Fernández lo convirtió a los 11'.
Wanderers no aflojó. Ganaba todos los duelos en la mitad de cancha y hacía daño por la banda izquierda. El segundo llegó a los 25'. Tras un mal despeje, Matías Marín agarró la pelota, gambeteó y definió con un zurdazo cruzado.
La U no reaccionaba. Le costaba sostener la pelota y en todo el primer tiempo no se generó ninguna situación clara para anotar.
Pero a la vuelta de camarines apareció Joaquín Larrivey. El goleador del Torneo conectó con un taco impresionante un centro desde la derecha a los 50'.
Ese tanto cambió el estado anímico del cuadro laico. Pero si bien había otra actitud, seguían los problemas de fondo. Nunca encontró la forma de romper el cerco defensivo de Wanderers ni tampoco le pudo poner un balón con ventaja a Larrivey.
El final del duelo fue emocionante. Fernando De Paul le atajó un penal a Ronnie Fernández, el lateral azul Marcelo Morales se fue expulsado por un planchazo y se jugaron más de diez minutos de tiempo agregado. La U sigue en baja, Wanderers crece y se ilusiona.
