Sergio Agüero anunció entre lágrimas este miércoles que dejaba el fútbol profesional. Debió tomar la decisión tras sufrir una arritmia cardíaca.
"Esta conferencia es para comunicar que he decidido de dejar de jugar al fútbol... la concha de...", expresó el "Kun" en Barcelona.
El argentino no es el primer futbolista que se retira por problemas cardíacos. En mayo de 2019, Iker Casillas sufrió un infarto durante un entrenamiento con el Porto de Portugal.
El arquero campeón del mundo con España contó que se iba quedando sin aire y que no podía respirar. Fue hospitalizado. Luego, en un control, le dijeron lo que no quería oír.
"Me dicen que las cosas están muy bien, que esto incluso mejor que antes. Pero, siempre hay un pero, te están dando a entender que también puedes o tendrías que dejar el fútbol", afirmó el ex Real Madrid.
Rubén de la Red compartió equipo con Casillas. Su carrera se truncó en 2008. Se desvaneció en un duelo de Copa del Rey ante el Real Unión Club de Irún. Se tuvo que retirar con solo 23 años por un síncope agudo.
De La Red siguió vinculado al Real Madrid. Estuvo cinco temporadas en las cadetes del club merengue como DT y luego pasó a la filial del Getafe. También trabajó como comentarista de televisión y ha jugado al fútbol con los veteranos del Real Madrid. Actualmente está Dubai. En el Al Nasr sigue su formación, busca adquirir experiencia internacional.
Lilian Thuram fue campeón del mundo con Francia 1998. Ya en el final de su carrera, con casi 40 años, dejó el Barcelona para fichar por el Paris Saint Germain. Sin embargo, en la revisión médica le descubrieron una malformación cardíaca.
"Quería ser el Maldini del PSG, pero no va a ser posible. Es triste acabar la carrera así", declaró.
El congolés Fabrice Muamba sufrió un paro cardíaco en pleno partido entre el Bolton y el Tottenham por la FA Cup. Estuvo "clínicamente muerto" en la cancha. Su corazón dejó de funcionar por 78 minutos.
"El partido se detuvo y fui llevado en ambulancia al hospital del tórax, fue un trayecto muy difícil en la ambulancia. Recibí otras 12 descargas eléctricas, una cantidad considerable para un período de tiempo tan corto. Es increíble que mi cuerpo haya podido resistir. Cuando llegamos al hospital me llevaron directamente al quirófano, donde me pusieron un catéter más grande en mi vena, me dieron más descargas eléctricas y medicamentos. 78 minutos después que desfallecí mi corazón comenzó a funcionar otra vez y recuperé el conocimiento", escribió tiempo después.
Otros jugadores que han sufrido problemas cardíacos
Christian Eriksen vivía un gran momento profesional. Tras ser campeón con el Inter, viajó a la Eurocopa para liderar a la prometedora selección de Dinamarca. Sin embargo, en el primer partido contra Islandia, se desmayó. Había desesperación, consternación. Se temió lo peor. Sus compañeros hicieron un círculo en torno a él para que las cámaras no grabasen.
Eriksen actualmente está a punto de rescindir contrato con el Inter, ya que por la normativa del Calcio un futbolista no puede jugar con un desfibrilador implantado. Se rumorea con que podría regresar a uno de sus ex equipos, el Ajax de Amsterdam.
El pasado sábado, el central del Manchester United, Victor Lindelof, tuvo que ser reemplazo a los 25 minutos en el duelo contra el Norwich. Se tomó el pecho y tuvo que hacer gestos.
"Por más de diez minutos, el ritmo cardíaco de Lindelof estuvo más alto de lo normal. Se sorprendió y no supo cómo tratar con ello. Le costaba respirar y sentía dolor en el pecho. Le hicieron todas las pruebas y todo parece ir bien", dijo el entrenador Ralf Rangnick.
Un día después de lo ocurrido en Manchester, la preocupación se instaló en Italia. A los diez minutos del partido entre Napoli y Empoli, Piotr Zielinski fue al banco haciendo señas de que tenía problemas en el pecho y la garganta. Según la prensa italiana, no podía respirar.