Manuel Melero, presidente de la Cámara Nacional de Comercio
El Mercurio
SANTIAGO.- Ante el despacho de la ley que que fortalece las facultades del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Manuel Melero, lamentó la decisión de la Cámara Baja y recalcó que la iniciativa podría "cortar puentes de comunicación en vez de crearlos".
"Como CNC lamentamos, al igual que lo ocurrido con la reforma laboral y tributaria, este proyecto que reforma al Sernac el que partió de una noción errada que plantea que los intereses de los consumidores y proveedores son contradictorios e irreconciliables", dice el primer párrafo del comunicado.
"En este proyecto vemos un texto que se enfoca únicamente en aumentar de manera desproporcionada las sanciones, poniendo énfasis en más fiscalizadores en las calles, en lugar de generar nuevos puentes de diálogo entre proveedores y consumidores", señaló Melero.
Luego enfatizó: "Como federación gremial insistimos que a través de esta reforma se convierte al Sernac en un ente sin parangón en nuestro país, que se apropia de un sinnúmero de facultades, muchas de las cuales son incompatibles entre sí".
Para el presidente de la CNC, la iniciativa que fue presentada a mediados del año 2014 y que hoy quedó lista para convertirse en ley, "entrega todas estas prerrogativas a un órgano unipersonal, sujeto a discrecionalidad y captura política. Entre todas ellas, la que más nos preocupa es la facultad normativa, ya que este es un rol que corresponde al Congreso y al Poder Ejecutivo".
Luego, el líder del gremio comercial puntualizó que "aunque se elimina el concepto de indemnización punitiva, se mantiene el de daños punitivos (...) Esto se traducirá en una doble sanción, así como la inclusión de indemnización de daño moral en demandas colectivas, lo que generará una gran incertidumbre".
Para finalizar su rechazo ante el proyecto que permitirá al Sernac tener facultades fiscalizadoras, normativas y sancionatorias, Melero puntualizó que "a pesar que existe cierto consenso en la necesaria modernización del Estado, esta futura ley avanza en la línea contraria y puede terminar por cortar puentes de comunicación en vez de crearlos".