SANTIAGO.- "
Tenemos un grave problema de desempleo", dijo el Presidente Sebastián Piñera después de que esta mañana el Instituto Nacional de Estadística (INE) informara que la tasa de desocupación nacional se ubicó en el 8,2% durante el trimestre enero-marzo, su mayor nivel en diez años.
Así, consultado por la cifra, el Mandatario dijo que "sin duda estamos enfrentando un grave problema". "Ustedes saben que en el mes de marzo se finiquitaron 300 mil empleos y, adicionalmente, la ley de protección del trabajo, que permite a las empresas y a los trabajadores acordar suspensiones o reducción de la jornada laboral sin terminar el vínculo laboral, significó que más de 60 mil empresas que representan a más de 600 mil trabajadores aplicaran a este beneficio".
Frente a este escenario, gatillado por la crisis sanitaria y económica generada por el coronavirus, el Presidente sostuvo que las cifras "muestran que tenemos un grave problema de desempleo" y que, al mismo tiempo, "tenemos que hacernos cargo de ayudar a esas personas que pueden estar temporalmente sin empleo a poder seguir sobreviviendo".
Así, recalcó que "la tasa de desempleo, y lo hemos dicho muchas veces, va a crecer, y por eso una de las principales preocupaciones de nuestro Gobierno es tejer esa red de protección social para que las personas que pierdan sus empleos no se queden absolutamente desamparadas, sino que tengan la ayuda solidaria del Estado y ojalá de toda la sociedad".
"Por esa razón estamos muy atentos al tema del empleo", dijo el Mandatario y agregó que "nuestra principal preocupación siempre ha sido crear empleos (...). Bueno, ahora además, vamos a preocuparnos mucho, como ya lo estamos haciendo, en proteger los empleos". En esa línea destacó el proyecto que permite a las pymes acceder a capital de trabajo a través de líneas de financiamiento entregadas por los bancos y pidió a las entidades bancarias "actuar con un sentido de urgencia".
Ingreso familiar de emergencia
Respecto al proyecto de ingreso familiar de emergencia, que ayer fue aprobado en la Cámara de Diputados y despachado al Senado, pero donde se rechazaron artículos clave de la iniciativa, el Presidente le pidió a la Cámara Alta aprobar la medida.
"El ingreso familiar de emergencia es un programa para darle ingresos a los sectores más vulnerables, a los trabajadores informales, que por no tener contrato de trabajo no pueden acceder al seguro de desempleo. Este proyecto beneficia a 1,8 millones de familias, es decir a 4,5 millones de chilenos y tiene un costo muy grande", recalcó desde el Palacio de La Moneda.
En ese sentido enfatizó: "Quiero decirle con mucha franqueza a mis compatriotas que hay dos formas de oponerse a los proyectos que van en ayuda de las personas más necesitadas: una es rechazándolos y la otra es pidiendo lo imposible".
"Le pido al Congreso que apruebe el proyecto de ingreso familiar de emergencia porque hay 4,5 millones de chilenos que lo necesitan ahora, con urgencia, y no hay ninguna razón para seguir dilatando este proyecto", recalcó al finalizar.
