La compañía Penta Vida presentó un "reclamo de ilegalidad" ante la Corte de Apelaciones de Santiago, en contra de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), por la circular que dictó, en el marco de la ley que permite un adelanto de las rentas vitalicias contratadas por los clientes.
En el escrito, ingresado ayer, la compañía expuso que el oficio emitido por el regulador, el pasado 30 de abril, enunciado como "Imparte instrucciones a las compañías de seguros de vida que mantienen reservas técnicas de rentas vitalicias, "es ilegal y causa perjuicio".
En uno de los aspectos que alega la firma - ligada a los empresarios Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín y representada, entre otros abogados, por el destacado constitucionalista Arturo Fernandois- es que la CMF "no dio cumplimiento a la obligación legal de efectuar su consulta pública".
También, Penta advierte que en el oficio reclamado "resplandecen por su ausencia los fundamentos que hagan necesaria su dictación".
"Finalmente, y como corolario del desdén administrativo con que la CMF asumió el sensible encargo de dictar las instrucciones sobre la materia, ni siquiera meditó -ni qué decir expresó- la evaluación del impacto que causaría el Oficio Reclamado, que tanto daño está provocando y provocará, y que pudo y debió evitar", señala el documento.
Penta Vida se enfoca en productos previsionales, siendo el principal las rentas vitalicias, cuya recaudación en el ejercicio de enero a diciembre de 2020 ascendió a 9,84 millones de UF (unos US$413 millones), en un mercado en que se recaudaron por concepto de primas 40,09 millones de UF, obteniendo esta reclamante en ese año el primer lugar en participación de mercado, con un 24,55% del mismo.
En la actualidad la compañía tiene alrededor de 65.000 clientes de rentas vitalicias para cuyo pago y servicio, administra e invierte activos por US$6.962 millones.
