La compra de alimentos y productos de primera necesidad, el pago de servicios – como agua, luz y gas- y la amortización de préstamos, figuran como los principales destinos de los recursos adquiridos por las personas a través del tercer retiro de ahorros previsionales, según lo señalado por quienes lo han realizado o piensan hacerlo, a través de una encuesta de consumidores confeccionada por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS).
Con todo, pese a que el estudio apuntó a que la estructura de prioridades se mantiene similar a la de los primeros dos retiros,
hubo cambios importantes en la intensidad de cada uso.
Así, por ejemplo, el porcentaje de quienes utilizarán parte de los recursos para la adquisición de alimentos y bienes de primera necesidad bajó casi diez puntos en relación al segundo proceso, desde un 62% de los encuestados a un 54%.
Algo similar ocurrió con la intención de pago de servicios básicos, que bajó desde un 47% en el segundo retiro a un 39% en el tercero. El pago de préstamos, en tanto, se mantuvo relativamente estable, en un 26%. Posterior esto se ubicó la intención de compra de bienes para el equipamiento del hogar, con un 22% - subiendo en relación al segundo retiro, pero bajando respecto del primero -.
Mientras que el porcentaje que indica que utilizará una parte del dinero en pagos de educación se mantuvo en un 18%, y quienes optaron por comprar vestuario y calzado subieron a un 16%.
Inversión
En la medida en que ha aumentado la disponibilidad de recursos de apoyo, la intención de invertir recursos en emprendimiento y en ahorro también ha crecido. En el primer caso, el porcentaje que piensa destinar fondos a emprendimiento subió desde un 8% en primer retiro a un 15% en el tercero. Por otra parte, quienes invertirán en instrumentos de ahorro pasaron del 8% al 13%.
Los segmentos de menores ingresos muestran tendencias muy marcadas en la compra de alimentos, pago de servicios básicos y educación, compra de bienes durables y hacer mejoras al hogar. Las personas de altos ingreso, en cambio, bajan su intensidad de compra de alimentos (40%), y ponen como segunda prioridad la inversión en instrumentos de ahorro, con un 23% (7% en el segmento D).
¿Por qué no optar por el retiro?
Respecto a las personas que no planean realizar el tercer retiro, el agotamiento de los fondos es la principal razón para no hacerlo, es más la cifra exacta fue de un 51%, una tasa muy superior a la observada en los retiros previos. El 26% de los que no harán el retiro, por su parte, indica no necesitarlo, y un 23% prefiere no tocar sus ahorros de jubilación.
Respecto de otros tipos de ayuda, un 28% declara haber recibido el Ingreso Familiar de Emergencia ampliado - 38% en el GSE D-, un 22% el bono clase media, un 12% en bono covid-19 y el 10% acudió al seguro de cesantía.
La disponibilidad de estos recursos aumenta a medida que disminuye el grupo de ingresos al que pertenece el encuestado, lo que va en línea con la focalización del gasto social.
Finalmente, la encuesta demostró que, si bien siguen siendo los protagónicos, disminuyó la intensidad en gastos de primera necesidad, mientras que, por el contrario, aumenta la intención de compra de bienes semidurables , como vestuario y calzado, a la vez que predomina la intención de destinar dinero para invertir en emprendimientos o en instrumentos de ahorro.
