La idea de JennerCon unas pústulas sumamente contagiosas, la viruela fue durante siglos un flagelo terrible.
En 1796, el médico inglés Edward Jenner tuvo la idea de inocular una forma del virus de la viruela benigna en un niño para estimular su reacción inmunitaria.
El proceso funcionó. Había nacido la "vacunación".
Primera vacuna obligatoriaEn Reino Unido, la vacuna contra la viruela fue obligatoria para los niños a partir de 1853. Esta obligatoriedad generó una oposición virulenta.
Los detractores alegaban el "peligro" de inyectar productos procedentes de los animales, "motivos religiosos" o "atentado a las libertades individuales".
A partir de 1898 se introdujo una "cláusula de conciencia" en la legislación británica para permitir a los recalcitrantes no vacunarse.
Pasteur y la rabiaA finales del siglo XIX, Louis Pasteur puso a punto una vacuna contra la rabia a partir de una cepa atenuada del virus. En 1885 se realizó una exitosa inyección a Joseph Meister, un niño al que le había mordido un perro sospechoso de tener rabia.
En este caso hubo también desconfianza. Pasteur fue acusado de querer enriquecerse con la fabricación de una "rabia de laboratorio".
BCG, difteria, tétanos...Tras la vacuna contra el tifus que se puso a punto al final del siglo XIX, la década de 1920 vio multiplicarse las vacunas contra la tuberculosis (BCG, 1921), la difteria (1923), el tétanos (1926) y la tosferina (1926).
También en ese período se empezó a utilizar sales de aluminio como coadyuvante para aumentar la eficacia de las vacunas. Esto sería también una fuente de sospecha para los detractores de las vacunas, en particular en Francia.
Falso estudio, verdadera desconfianzaEn 1998, un estudio publicado en la prestigiosa revista médica The Lancet sugería una relación entre las vacunas SPR (sarampión, paperas, rubeola) y el autismo.
Sin embargo, al tiempo se descubre que se trataba de un engaño del autor Andrew Wakefield. Pero ni el desmentido oficial de la revista ni los trabajos posteriores demostrando la ausencia de vínculo lograron acallar los temores, que en algunos casos incluso perduran hasta nuestros días.
Este estudio desmentido sigue siendo habitualmente citado por los detractores de las vacunas.
Este escepticismo tiene como consecuencia el "resurgimiento de algunas patologías contagiosas" como el sarampión, subraya Patrick Zylberman en su libro "La Guerre des vaccins" (La guerra de las vacunas).
El sarampión mató a 207.500 personas en el mundo en 2019, 50% más que 2016, en un contexto de disminución de la vacunación global, advierte la OMS.
Fracaso de la vacunación H1N1En 2009, la pandemia de gripe H1N1, causada por un virus de la misma familia que el de la gripe de 1918, hizo sonar las alertas en la OMS. Se organizaron campañas de vacunación, pero la epidemia fue menos grave de lo previsto, causando sólo 18.500 muertos.
Millones de dosis tuvieron que ser destruidas y los reproches a la mala gestión reforzaron la desconfianza en las vacunas en numerosos países, donde los "antivacunas" subrayan casos de efectos secundarios, pese a que son muy raros.
Polio y la teoría del complotOficialmente erradicada desde agosto de 2020 en África gracias a la vacuna, la poliomielitis se resiste en Asia, en Pakistán y Afganistán, donde esta enfermedad provoca parálisis en los más pequeños.
El fracaso de las campañas de vacunación se explica sobre todo por la desconfianza de las poblaciones rurales y la creencia en teorías de complot contra los musulmanes.